Silvia Gajino es profesora en el colegio Cristo Rey de Oleiros. Trabaja como voluntaria desde hace años y no dudó en atender la llamada de AIRE. Ella y una amiga dedicaron el mes de julio a cargar y descargar en el almacén, a cuidar de los niños en la guardería, entre otras labores. "Fue la mejor experiencia de mi vida, pero también la peor, Lo más duro fue la vuelta", relata esta voluntaria, que colaborará "donde haga falta".