Un pesquero de Mera, O Corpiño, encontró ayer alrededor de las diez de la mañana el cadáver de un hombre. Los pescadores se toparon con el cuerpo al recoger las artes de pesca cuando se encontraban aproximadamente un kilómetro y medio al oeste de la playa de Doñinos, en la zona de Ferrol.

El barco de salvamento Salvamar Betelgeuse trasladó el cadáver, todavía sin identificar, al muelle coruñés de Oza, donde atracó cerca del mediodía, según confirmaron fuentes de Salvamento Marítimo. El patrón de la Cofradía de Mera, Guillermo Neira, explicó ayer, pocas horas después de producirse el hallazgo, que el cuerpo se encontraba en avanzado estado de descomposición, lo que dificultó su identificación. "Nos llevamos una impresión bastante fuerte, una cosa es decirlo y otra verlo", relató el pescador acerca del hallazgo del cuerpo entre las redes de pesca del barco oleirense.

La Policía Judicial de la Guardia Civil inició las labores para tratar de lograr la identificación del cadáver. Los trabajos para intentar aclarar la identidad del fallecido comenzaron en el muelle coruñés. La Policía Judicial abrió también una investigación para tratar de esclarecer los hechos.

Después, el cadáver fue analizado por el Instituto de Medicina Legal de Galicia para profundizar en la determinación de su identidad, que requerirá del apoyo del laboratorio de ADN debido al avanzado estado de descomposición en que se encontraban los restos, que impedía identificarlo sin ayuda de análisis científicos.