Esta educadora social formaba parte de la Asociación de Vecinos Colonia El Paraíso de Oleiros desde su constitución en 2011 y desde el pasado 1 de junio es su nueva presidenta. Su primera actuación ha sido organizar, el pasado jueves, un acto educativo y ambiental además de reivindicativo, que implicó a varias familias de Perillo preocupadas por la limpieza de la ría de O Burgo y sobre todo por el futuro del último pulmón verde de este ámbito, el precioso bosque de O Paraíso, una gran masa forestal al borde del mar que a pesar de numerosas talas en los últimos años aún hoy se conserva y hace que esta urbanización sea peculiar, una isla verde al lado de la agreste zona empresarial de la Nacional VI. Sin embargo una promotora ya inició los trabajos para construir en esta zona una urbanización de casi un centenar de viviendas y los residentes temen perder esta gran zona verde.

- Esta urbanización de El Paraíso se fue construyendo entre los años sesenta y setenta. Pero la asociación de vecinos se constituyó en 2011. ¿Por qué surgió la iniciativa?

-Todo empezó en ese año porque los vecinos solicitamos que se abriese una calle hacia la Nacional VI debido al mal acceso que tiene la urbanización ya que para ir en dirección A Coruña tienes que dar un gran rodeo para hacer el cambio de sentido. Planteábamos que un camino que hay en la urbanización y por el que se conecta con la Rúa Os Sauces fuese ancheado y pudiesen pasar los vehículos, lo que permitiría hacer el cambio de sentido antes y sin rodeos. Entonces, mirando el plan general y preguntando, fue cuando nos enteramos de que la sociedad Urbanización El Paraíso 2005 SL, donde está el empresario José Collazo Mato, había comprado ya un terreno y tenía previsión de construir una urbanización. Entonces nos organizamos y creamos la asociación con los objetivos fundacionales de preservar este bosque, conservar el medio ambiente y el entorno natural frente a los intereses especulativos y considerando que este bosque aún tenía un gran porcentaje de arbolado autóctono. Se hizo constar en los estatutos que nos motivaba defender este entorno natural.

- La urbanización de vivienda colectiva y chalés se tramita con gran rapidez. En 2014 el promotor taló unos 300 árboles de este bosque, según el Concello ejemplares de eucalipto y otros supuestamente en mal estado, y hace unas semanas ya se realizaron las mediciones.

-Sí, porque Collazo, y Etcheverría que también está en esta promoción, compraron más terrenos, uno que le faltaba de una vecina que se oponía y hace unas dos semanas compró también otro terreno con una casa de piedra. Dicen que la venta fue de unos 600.000 euros y también se oye que los futuros chalés que van a construir se venderán a unos 700.000 euros.

- Pero el propietario de un terreno en el que se pueda construir tiene derecho a hacerlo, no pueden hacer frente a esta actuación urbanística.

-Para nosotros lo ideal sería que no se construyese, claro. De hecho creo que se podrían haber buscado alternativas, el Concello siempre destaca su labor de defensa del medio ambiente y de comprar bosques y hacer zona verde, pero aquí, al igual que en Santa Cruz con el futuro hotel al borde del mar, no se apostó por lo público. El alcalde dice que gracias a este desarrollo urbanístico se van a tirar los muros de estas fincas y se alargará el paseo y así el bosque podrá ser de acceso a todo el mundo, pero ya lo era, aquí venía gente ya a pasear por la zona. Es cierto que había un muro hasta el borde del mar que cortaba el acceso, pero se podía tirar al estar en zona de dominio público y prolongar el paseo hasta el Paraíso, incluso gestionar para comprar los terrenos y conservar así este bosque como zona verde pública. Aquí estuvo mirando para montar su escuela-bosque la profesora que después se fue a Dexo. Éste sería un buen lugar para este tipo de iniciativas que combinan naturaleza y educación. También sería ideal para un centro de observación ornitológica, podrían haberse hecho muchas cosas.

- El proyecto de la promotora (ya en el trámite ambiental en la Xunta) afirma que conservará el arbolado que pueda precisamente porque se da cuenta de que los futuros chalés tendrán "un valor añadido" así, al estar "envueltos en una vegetación exuberante", según dice.

-Eso es lo que figura en el proyecto pero no sabemos si realmente se cumplirá. Hay muchos castaños y robles que dejaron de la última tala y que hace unas semanas vinieron a marcar con pintura naranja. Cuando se marcan son para cortarlos. Aquí ya hubo hace años una gran tala de sauces, de hecho la calle al lado se llama así, Los Sauces.

- El Paraíso es efectivamente un vergel verde, al borde de la ría pero protegido por el arbolado, una zona desconocida... pero también muy olvidada.

-Sí, nos hemos quedado muy aislados. Termina la pista asfaltada tras pasar la gasolinera Galp y son caminos de tierra, sin acera ni servicio de recogida de basura, a pesar de ser suelo urbano. Tenemos que cargar con las bolsas de basura hasta los contenedores de la Nacional VI, un buen trecho. Dicen que el camión aquí no puede dar la vuelta. Y para que a una vecina le pusiesen un punto de luz, tardaron años.