La empresa Goodleit, con sede en Alcorcón, tramita un proyecto para implantar una planta procesadora de leche en el polígono de Teixeiro. El proyecto básico, a exposición pública para la evaluación de incidencia ambiental, prevé un gasto de 18,5 millones en las obras de urbanización y construcción, incluidos los trabajos de instalación eléctrica y mecánica.

La promotora se constituyó en febrero del pasado año y, según los datos del Registro Mercantil, dispone de un capital social de 2,5 millones. Entre sus integrantes están Dominique Blancho, que fue consejero delegado de Senoble Ibérica, filial del grupo de Senoble vendida en 2015 a Screiber Foods, y Alfonso, Ignacio y Guillermo Escobar López, que dirigen Lácteos Industriales Agrupados (Liasa), una empresa con sede en Guadalajara dedicada a la preparación de leche y otros productos lácteos.

La implantación de esta empresa fue anunciada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, el 8 septiembre de 2016, en la antesala de las elecciones. El Gobierno gallego envió un comunicado a los medios acompañado de una fotografía del presidente con Dominique Blancho en la que anunciaban una inversión de 70 millones en una planta con capacidad para procesar el 17% de la leche producida en Galicia y transformarla en productos con valor añadido destinados a la exportación, especialmente a mercados de África y Asia.

La tramitación del proyecto básico para evaluar su incidencia ambiental supone el primer paso para la implantación de la planta procesadora desde su anuncio, en septiembre de 2016. El proyecto recoge que la planta ocupará 10 parcelas del polígono de Teixeiro con una superficie total de 39.891 metros cuadrados.

La memoria de incidencia ambiental recoge que la planta dispondrá de varias naves para las distintas fases del proceso. Uno de los edificios dispondrá de cinco plantas con una altura total de cuarenta metros. La urbanización estará definida por un vial perimetral de ocho metros que recorre toda la parcela y en torno a la que se distribuyen las zonas verdes -que ocuparán el 10% de la superficie-, las zonas de aparcamiento y carga y descarga.

El proyecto prevé inicialmente un tráfico diario de 11 o 12 camiones, que podrían llegar a 70 "en futuras ampliaciones" (solo 1 o 2 al día de carga de producto final). Los promotores contemplan inicialmente un muelle de recepción para la leche transportada desde las granjas, que dispondrá de una bomba de alimentación con una capacidad máxima de 20 metros cúbicos a la hora y que trabajará entre 8 y 10 horas al día. La capacidad de recepción diaria que estiman oscila entra las 160 y las 200 toneladas de leche cruda (la empresa reserva espacio para la posible ampliación futura a cuatro muelles de recepción).

La leche se almacenará en dos tanques con capacidad de 100 toneladas cada uno y que estarán conectados a las líneas de desnatado y pasteurización. Prevé procesar 70.000 toneladas de leche fresca cruda al año y seis toneladas al día de producto acabado. La empresa realizará labores de separación y secado de los componentes de la leche, tales como proteínas, para ser usados como ingredientes funcionales y nutricionales de alto valor añadido en productos nutricionales, dietéticos, de alimentación infantil, deportiva y clínica.

Los productos que prevé elaborar son leche desnatada en polvo (435 toneladas al año); concentrados de proteína láctea 90% nativa (625 toneladas al año); proteína láctea 85% nativa (390 toneladas al año); caseína micelar 90% nativa (780 toneladas al año), y proteína sérica 90% nativa (780 toneladas al año). Suman cerca de 2.500 toneladas en total al año. Los principales subproductos que prevé elaborar son permeado (12.500 toneladas al año) y nata (6.200 toneladas al año).

Las estimaciones que recoge el proyecto contrastan con las que anunciaba la Xunta en 2016. Los promotores, acompañados por Núñez Feijóo, preveían entonces que se procesarían anualmente "400.000 toneladas de leche procedentes de las granjas gallegas". Su objetivo era 130 empleos directos. Incidían desde la Xunta en que la planta procesaría más del 15% de la leche producida en Galicia.