El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, avanzó ayer la pronta resolución del expediente abierto contra la familia Franco por las trabas para visitar el pazo de Meirás, declarado Bien de Interés Cultural en 2011 pese a la férrea oposición de los propietarios. El responsable autonómico avanzó ayer que el expediente abierto a la familia Franco por incumplir el régimen de visitas del pazo de Meirás está "a punto de cerrarse" y que, "seguramente", tendrá "carácter sancionador".

A preguntas de los medios, el titular de Cultura explicó que la resolución del expediente abierto el pasado mes de marzo se concluirá "en semanas" y que posiblemente tendrá "un carácter sancionador dentro del marco legal que hay fijado por la ley de patrimonio". No se trata de un tema "fácil", ha matizado.

Será la primera multa a los Franco tras años de quejas por los incumplimientos en la gestión de las visitas al pazo de Meirás. La sanción ascenderá a lo sumo a 6.000 euros, la cuantía máxima que recoge la ley. La Xunta había abierto un expediente en 2016 tras recibir las quejas del Concello de Sada y algunos particulares, pero archivó el caso al dar por buenas las explicaciones de los propietarios, que apelaron a problemas puntuales con el correo electrónico y el teléfono.

Las quejas se reiteraron este año tras permanecer varias semanas inoperativo el teléfono para reservar cita. Y volvieron a saltar este mes de agosto por la decisión de los propietarios de no atender el teléfono ni el correo de reservas y de reprogramar las visitas, que en lugar de ser todos los viernes, se fijaron los días 1,2, 30 y 31 para que los visitantes no perturbasen su mes de veraneo.

El anuncio de la multa llega un día después de la "conquista simbólica" del pazo de Meirás organizada por una veintena de militantes del BNG. Según ha podido saber este diario, la Guardia Civil ha puesto ya en manos del juzgado de Betanzos un informe del asalto.