"Ahora me llaman la capitana", relata Luisa Louro Díaz mientras posa orgullosa junto al mural de la calle Balado que ha dejado al descubierto sus poderes ocultos, esa fuerza sobrehumana que le permite cargar una bombona de butano con un solo brazo y hacer equilibrios sobre otra sin perder la sonrisa.

El artista cambrés Joseba Muruzábal, alias Yoseba MP, ha sacado del anonimato a esta heroína, que ha sido rebautizada ya como la mujer acróbata de Cambre. El muralista, conocido por su serie Fenómenos del rural, tiene un don para detectar superabuelas, como esta jedi a la que la fuerza siempre acompaña, capaz de ocultar la fealdad de una medianera con su mera presencia.

Con ella son ya tres las heroínas de Cambre que Yoseba MP ha inmortalizado en unos murales con los que saca los colores a las fachadas de la provincia. La greleira de los cincuenta pies y la mujer microondas son las otras dos integrantes de esta Patrulla X de la tercera edad que habría inspirado a Stan Lee una nueva saga,

Las tres compartían amistad y traje de batalla, ese mandil a cuadros disponible en cualquier mercadillo que solo destapa los poderes de las auténticas superabuelas, bromea Yoseba. Una de ellas, A Carabela, falleció hace unos años, bien sobrepasados los noventa años. "A los 92 años seguía trabajando en la huerta, ¡y no veas como bailaba!", recuerda Luisa. A ella y a Lola, la greleira de los cincuenta pies, aún les queda cuerda para rato.

A los que conocen a Luisa no les ha cogido por sorpresa su fuerza sobrehumana. Ella y su marido se liaron hace años la manta a la cabeza y emigraron a Surrey para mantener a sus tres hijos. "Tuve que dejarlos aquí, uno solo tenía ocho meses", relata. Fueron años duros, de ganarse la vida tras la barra de un bar y vivir con lo justo para mandar los ahorros a Galicia. Pese a que tenía solo nociones muy básicas del idioma cuando puso los pies en Inglaterra, Luisa fue capaz de adaptarse rápidamente a su nueva vida. Eso sí, sin llegar a sobreponerse a la morriña y sacando de donde no había para regresar periódicamente a casa y no perderse la infancia de sus pequeños.

La vuelta al hogar no supuso el fin de los desvelos. En Cambre continuó trabajando sin descanso, limpiando domicilios y atendiendo la cafetería que fundaron a su regreso. Ni con la jubilación pudo colgar el mandil. Ahora cuida de sus nietos y biznietos y saca tiempo para dar el do de pecho en la coral del pueblo. "Soy una de las fundadoras", cuenta orgullosa.

Durante los últimos años ha sufrido dolorosas pérdidas, pero no pierde la retranca. "Si eso no son superpoderes...", incide Yoseba. Él conoce a Luisa desde hace muchos años. Es la abuela de una amiga y, ahora, una de sus Fenómenos, la serie con la que aspira a "dar testimonio del trabajo de las mujeres del rural".

Su mural es uno de los que deja la primera edición del Cromático Mural Fest, el festival que han puesto en marcha Mutante Creativo y el Concello de Cambre para apoyar a los jóvenes creadores, combatir el feísmo con litros de pintura y, de paso, destapar superpoderes de mujeres anónimas como Luisa, la mujer acróbata o "la capitana", como se refieren a ella en el vecindario.