Las dos grandes obras de Oleiros aún no han comenzado; la de la instalación del sifón desde la rotonda del Che Guevara lo hará el próximo lunes, día 13, y después le tocará el turno a la construcción de la rotonda de Santa Cruz, y sin embargo, en los días previos a lo que se calcula que podría generar un caos de tráfico, ya se han iniciado multitud de pequeños trabajos de infraestructuras en ambas zonas, Santa Cruz y Perillo. En Perillo está cortado el carril de acceso y toda la Corredoira das Viñas para instalar los servicios de la futura urbanización en ejecución. Ahora están con el gas.

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La actuación aún durará varios días, y obliga a los clientes del supermercado Familia a seguir por la avenida Che Guevara y en la rotonda coger la rúa Miradoiro y luego bajar por la piscina, todo un rodeo para ir al aparcamiento. Una señal junto al monumento ya indica por dónde coger el desvío al súper.

La mitad de la acera de la derecha de Che Guevara además, en dirección Santa Cruz, estaba ayer ocupada cerca de la glorieta por vallas de obra ya que la adjudicataria de los trabajos del sifón ha empezado con actuaciones previas. La base la han fijado en la finca situada al inicio de la rúa Miradoiro, frente a la rotonda, donde instalarán las casetas de obra y dejarán la maquinaria.

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Las obras en Oleiros que afectarán al tráfico

Ya en Santa Cruz, dos carteles de obra anuncian el corte de la avenida Emilio Pardo Bazán que lleva a Sada, pero no está cerrada, el desvío aún entrará en vigor la próxima semana pero los carteles ya están destapados.

En el cruce siguen los trabajos para sacar los tanques, con entrada y salida de camiones, y un poco más abajo siguen las obras del tanque de tormentas, cuya tierra se deja junto a la plaza Esther Pita. En principio se iba a dejar en la parcela anexa pero en ella se ha aprovechado para iniciar los trabajos de una futura edificación, en el cruce entre Concepción Arenal y Blanco Amor.