El Concello de Oleiros realizó en julio de 2016 el proyecto para expropiar 54.532 metros cuadrados de terreno en la zona denominada Bastiagueiriño, al borde del mar, unas cuarenta parcelas de suelo rústico de protección de Costas (entre ellas, una propiedad del propio alcalde). Para hacerse con ellas reservó una partida de 402.550 euros (a unos siete euros el metro cuadrado). Ésa fue la primera fase de una actuación destinada a construir un gran parque, previsto en el plan general como zona verde ZV-10, que uniría así el parque de As Galeras con la zona de la playa de Bastiagueiro. Ahora, para 2018, el Gobierno local acometerá la segunda fase de este proyecto, la expropiación de las tres viviendas situadas en este ámbito, una actuación para la que el Ayuntamiento ha reservado una partida de 543.493 euros en el presupuesto que llevará a pleno mañana jueves.

El proyecto expropiatorio de 2016 incluyó solo el terreno, no las viviendas que están ubicadas en la zona, porque según explicó entonces el propio alcalde, Ángel García Seoane, quería esperar al año 2018 porque es cuando "se les acaba la concesión de Costas" a los propietarios de estas tres casas al borde del acantilado, construidas en los años setenta "ilegalmente, con autorización de Costas y del Ayuntamiento, y algunas cogiéndole terreno al mar", según aseguró García Seoane en 2016.

Al caducar la concesión, la Demarcación de Costas recuperará la titularidad de estos terrenos puede darle un nuevo uso pero según indicó el regidor el Concello quiere negociar con este organismo para que no le dé nuevo uso "y poder eliminar las viviendas, después de indemnizar a los propietarios".

Una de las viviendas existentes en la zona está a la venta desde hace varios años. En otra, la propietaria declaró en su día que quería marcharse a A Coruña, por lo que solo quedaría una casa, en la que vive una pareja mayor.

El objetivo del Concello es sumar hasta 54.000 metros cuadrados para crear este gran parque. Otra parte de los terrenos, al otro lado del camino de Os Fieitos, prevé lograrlos mediante cesión (son unos 19.000 metros).

Ésta no es la única expropiación que prevé el Ayuntamiento de Oleiros para el año que viene. También incluye una partida de 140.700 euros para expropiar parte del muro del pazo de Arillo, también denominado finca de A Brava, finca del Mejicano o Villa María Docampo. Es una gran propiedad, donde existen viveros de producción de flor, y el Gobierno local quiere ampliar la carretera que la bordea en un frente, hacia Mera, pero se encuentra conque no puede derribar el muro de piedra, de unos 200 metros de largo, porque está protegido por su valor histórico.

La alternativa que planteó en 2016 el Concello oleirense fue expropiar el muro, no derribarlo, y construir la acera y carril bici por dentro de la propiedad. Aunque estaba en negociaciones con la familia, finalmente el presupuesto de 2018 prevé la expropiación de este tramo.