El Gobierno local de Oleiros en 2014 envió un escrito al colegio Parga Pondal para saber si los padres tendrían interés en poner en marcha el programa de caminos seguros escolares, rutas a pie desde casa al colegio por las que pueden ir ellos de forma segura, un sistema que ya funciona hace tiempo en A Coruña y en Culleredo, y que este año se implantó en Cambre, y hace unos días, en Curtis. Sin embargo, tres años después de este comunicado aún no se ha implantado este sistema y la comunidad escolar del centro educativo está a la espera, sin conocer por qué se demora este proyecto que consideran que es positivo.
El Gobierno local explicó ayer que el proyecto para fijar unas rutas escolares seguras para los alumnos "está avanzado", y ya están diseñadas las dos rutas que utilizarían para acudir hasta el centro educativo, pero falta acordar y coordinar entre colegio, asociación de padres y policía para su implantación. Para poner en marcha este programa hacen falta "colaboradores", padres o voluntarios que puedan acompañar a los escolares por estas rutas hasta el colegio.
El Ejecutivo local señala que "en los próximos meses" se podría implantar la iniciativa, aunque considera que ya no estaría listo para el actual curso escolar. Poner en marcha este proyecto de sendas escolares seguros implica a varios departamentos, desde Obras Públicas a Urbanismo, Orden Pública y Educación, además de policía, padres y comunidad escolar, e incluso de hosteleros (que colocan pegatinas en los locales para marcar el camino).
Con esta iniciativa se ayudaría a paliar problemas como el de niños que quedan fuera del servicio de transporte escolar por falta de plazas o padres con problemas de horarios para poder acompañar a los hijos hasta el colegio. También ayudaría a fortalecer la autonomía de los pequeños.
