Coirós aguarda desde 2009 a que el Gobierno central cumpla su promesa de eliminar el punto negro de Queirís. El Ejecutivo estatal prometió hace ocho años incluir las mejoras en la bifurcación de la Nacional-VI hacia A Coruña y Betanzos, un cruce peligroso, en un plan de reforma y acondicionamiento de la carretera. En ese tramo se han registrado varios accidentes mortales en los últimos años. La preocupación y el enfado de los vecinos ante la demora del Gobierno central en cumplir su promesa llevó a algunos residentes en el municipio ha organizar protestas y poner en marcha una campaña de recogida de firmas para urgir al inicio de estos trabajos. La supresión del punto negro de Queirís, la mejora de las entradas a los núcleos de población en este tramo de la carretera y la ampliación de los arcenes para garantizar la seguridad de los peatones son las demandas.