El Instituto Galego de Estatística (IGE) acaba de publicar la demografía empresarial de los concellos respecto al último año analizado, 2016, y muestra que en la comarca de A Coruña el municipio de Cambre es el que ha registrado un mayor crecimiento empresarial. La diferencia entre la tasa de creaciones y la de extinciones de entidades empresariales respecto al año anterior ha sido un saldo positivo del 3,59%, prácticamente el doble de lo sucedido en el resto de municipios, entre ellos A Coruña.
Tras Cambre, los ayuntamientos con mejor resultado, también por encima de la ciudad de A Coruña, han sido Abegondo con una tasa bruta de crecimiento empresarial del 2,56% y Oleiros con un 2,52%.
Antes del inicio de la crisis económica en 2008, los municipios del área metropolitana tenían todos, salvo Abegondo, un saldo positivo en el número de empresas, se creaban muchas más de las que desaparecían, y Bergondo y Culleredo eran los dos grandes motores. Todo cambió a partir de la crisis. En 2010 los datos en relación a 2009 ya mostraban una tasa negativa en todos los concellos de la comarca menos Abegondo y Arteixo. Los peores años fueron 2012 y 2013. El IGE en 2013 registra una tasa de crecimiento empresarial en Abegondo, por ejemplo de un -7,99%, el mayor descenso registrado en toda el área desde 2008. La mejoría se notó en el año 2015, donde curiosamente Abegondo, que había liderado la mayor caída en número de empresas en 2013, pasó a ser líder de la comarca en aumento empresarial con una tasa del 5,26%, sin comparación con el resto de municipios (el segundo con mejor resultado fue Carral con un 2,17%).
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Desde 2015 a 2016 los datos muestran así que Abegondo, que estaba mal antes de la crisis, ha sabido salir adelante, en un concello donde se ha fomentado mucho el empleo verde y el emprendimiento en relación al campo.
Bergondo y su polígono empresarial tuvieron una tasa de crecimiento muy alta y aguantaron hasta 2011 pero desde 2014 tiene un saldo negativo, no logra recuperarse. Oleiros no entró en valores positivos hasta 2015 y Arteixo, otro de los más fuertes en actividad empresarial antes de la crisis, apenas tiene movimiento.
