La empresa Transportes Vasa Norte pretende instalar una planta de valorización de residuos de obras y demoliciones (ROD) en Carral. Plantea ubicarla en una parcela propiedad del promotor y próxima a la explotación minera de O Castelo de la que es titular otra empresa del mismo grupo, Canarga, lo que permitiría coordinar la actividad para ofrecer más productos, como consta en el estudio de impacto ambiental simplificado presentado por la promotora ante la Xunta, a la que solicita autorización.
La planta se dedicará a clasificar y procesar los residuos de obras "con el fin de obtener árido reciclado y material apto para su uso como aglomerado", explica el estudio. La parcela en la que se pretende ubicar la planta se encuentra en el concello de Carral, en dirección al Xalo desde la capital municipal, al sureste de la urbanización O Castelo. Linda al este con las concesiones de explotación minera titularidad de empresas pertenecientes del mismo grupo, factor clave en la elección propuesta para el emplazamiento.
La parcela está clasificada como suelo rústico ordinario, tiene una superficie catastral de 20.145 metros cuadrados y cuenta con una zona edificada y urbanizada, que será la que se emplee para desarrollar la actividad, que no ocupará la totalidad de la parcela, detalla el documento. Sobre parte de la parcela se situarán tanto las instalaciones de la planta como los acopios temporales de producto finalizado. "El espacio es suficiente para las capacidades de la planta y cuenta con zonas cubiertas para acopiar el fresado antes y después de ser valorizado", señala el estudio, que aplaude la reutilización de construcciones e infraestructuras existentes y descarta "la implantación en otras zonas más alejadas, tales como polígonos industriales, por criterios de transporte y sinergias".
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"La principal salida de material valorizado se encuentra asociado a las actividades desarrolladas en la explotación minera O Castelo, próxima a la ubicación elegida, situación que minimiza las necesidades de transporte. Alejarla de este punto sería un error tanto económico como medioambiental", sentencia el documento. Precisa que dentro del recinto minero que explota Canarga existe una planta de aglomerado asfáltico que se surte de los áridos producidos en la explotación y que la empresa explotadora de la cantera produce y comercializa árido natural, lo que "favorece varias líneas de mercado de los residuos de obras y demoliciones valorizables en la planta de Vasa Norte". Prevé "sinergias empresariales" en ventas, ya que el árido reciclado utilizaría los mismos canales de distribución que el árido natural producido en la explotación de Canarga, y en operaciones, con la "mejora de las capacidades instaladas en ambas plantas".
En cuanto a los posibles efectos ambientales que tendría la actividad de la planta, el estudio sostiene que no habría afección. Solo prevé emisiones de polvo, que pretende mitigar con medidas como el riego.
