La alegría de los conductores que circulan habitualmente por la carretera que atraviesa el polígono de Morás ha durado poco. Los baches han vuelto a aparecer en poco tiempo. La Consellería de Infraestruturas e Vivenda contrató en 2017 a la empresa Taboada y Ramos para construir el vial definitivo del parque empresarial. La empresa habilitó un desvío provisional para poder realizar la actuación. En pocos meses el firme de esta carretera, totalmente nueva, se ha llenado de baches, incluso hay algún socavón de tamaño considerable. Antes de estos trabajos el antiguo vial ya se encontraba en mal estado y tenía varias bandas reductoras de velocidad.

El carril derecho en sentido Arteixo tiene el firme muy deteriorado, con numerosos baches. Los conductores que circulan en esta dirección optan por invadir parte del carril contrario, que está en mejores condiciones. El desvío provisional también tiene una bajada con gran pendiente en la que se acumula el agua en la parte de abajo.

La Consellería de Infraestruturas explica que "con las últimas lluvias" el firme del desvío provisional "se deterioró bastante" y que la empresa encargada de la obra realizará "una actuación" que sirva para mantener el vial "en condiciones" mientras se finaliza la ejecución de la carretera definitiva. El Gobierno gallego indica que estos últimos trabajos estarán terminados en "unos dos meses".

El BNG de Arteixo denuncia que la empresa que realiza la obra en el polígono de Morás no ha tomado "ninguna" medida para garantizar la seguridad de los conductores que utilizan diariamente el desvío provisional. La formación nacionalista asegura que es "urgentísimo" reparar la carretera, que en este momento tiene un firme muy deteriorado.

Los trabajos que la Xunta contrató a Taboada y Ramos comenzaron el pasado verano. La obra consiste en la ejecución de una nueva carretera sobre el trazado anterior. El organismo que gestiona el polígono de Morás, Xestur, licitó los trabajos por unos 1,5 millones de euros y finalmente los adjudicó por 821.000 euros. Con esta actuación el Gobierno gallego adaptará el vial para que se convierta en el principal acceso al polígono de Morás, aunque solo lo hará parcialmente. Construirá la calzada central y dejará para más adelante -cuando se reanuden las obras de urbanización del polígono- la ejecución de los carriles de servicio que la Xunta prevé que estén al lado de la calzada de la carretera, que une Arteixo y Uxes.