La Demarcación de Costas en Galicia ha detectado que ha habido "un retroceso" en las dunas de la playa de Barrañán, en Arteixo, desde que finalizó la construcción del dique principal del puerto exterior de Langosteira. Este organismo explica que alertó de esta situación a la Autoridad Portuaria de A Coruña en la Comisión de Seguimiento del Programa de Vigilancia Ambiental de la dársena y que le propuso "verter arena" para recuperar el terreno que el mar ha ganado en los últimos años.

El Puerto aprobó el pasado lunes destinar un total de 150.000 euros -70.000 de una partida que no utilizó en 2017 y 80.000 a mayores- para la realización de una actuación para recuperar el "sistema dunar" de la playa, según indica el documento de modificación del plan de inversiones para el año 2018.

En este mismo escrito la Autoridad Portuaria también reconoce que "Demarcación de Costas en Galicia indicó que se ha producido un significativo retroceso" de las dunas la playa de Barrañán "desde la terminación de las obras del dique, solicitando que se estudie una actuación a realizar en la primavera de 2018".

La declaración de impacto ambiental del puerto exterior de Langosteira obligó a crear la Comisión de Seguimiento del Programa de Vigilancia Ambiental. El organismo portuario señala en el documento de modificación del plan de inversiones que debe "hacer frente a los compromisos derivados del obligado cumplimiento" de la declaración de impacto ambiental de la dársena de Langosteira.

Las obras del puerto exterior han alterado notablemente las corrientes y mareas del litoral de Arteixo. Las playas de Alba y de Sabón han aumentado considerablemente su tamaño en los últimos años. La arena no para de llegar debido a los movimientos de las corrientes provocados por el dique de Langosteira. Incluso surgió un nuevo arenal ubicado entre el contradique y la desembocadura del río Seixedo en la playa de Sabón. Muchos bañistas se decantaron por ir a esta nueva playa debido a que cuenta con más zonas para estacionar y no está tan saturada como los arenales de Alba y de Sabón.

Otro de los cambios que vivirá la costa de Arteixo será el traslado del monumento al voyeur, ya que parte de la obra interfiere en una de las enfilaciones que los barcos utilizan para entrar en el puerto exterior de Langosteira, con lo que esa anomalía debe ser corregida. La Autoridad Portuaria realizará el traslado.