Una esquina del molino de Galiñeiros en Cecebre, protegido y más que centenario, se ha desplomado sobre el río Mero este mediodía. El molino, situado a 300 metros de las compuertas de desagüe de la presa de Cecebre, aún conserva en muy buen estado en su interior cuatro aparatos de molienda, que no resultaron afectados.
Se desplomó una esquina de piedra, con suelo de hormigón, la situada justo encima del cauce del río. Al agua se cayó parte del suelo y de la pared y también algún mobiliario de poco valor, como una lámpara, un banco de madera o unos cojines. Anexo al molino se ubica una vivienda, habitada aunque en ese momento la dueña estaba trabajando en A Coruña y fue avisada por el Concello.
La Guardia Civil, que acudió al lugar, precintó el paso junto al molino, ya que por allí pasa una ruta de senderismo, un paseo fluvial al borde del Mero, muy utilizado por paseantes y ciclistas y también por pescadores en temporada. A la zona acudió también el alcalde de Cambre y técnicos municipales. El Concello no descarta un nuevo desplome ya que el primero ha generado una grieta en el edificio del molino y podría agravarse con la llegada de un nuevo temporal esta madrugada.
Las compuertas de la presa de Cecebre están abiertas y soltando una gran cantidad de agua, que baja con mucha fuerza por el cauce.
