El Concello de Arteixo pretende ejecutar este año la ampliación de la travesía de A Groufa, con el objetivo de que el vial sirva de conexión principal entre los polígonos de Sabón y Morás. El alcalde, Carlos Calvelo, asegura que el Gobierno local encargará este mes el proyecto constructivo y que la obra se realizará durante "este año". Esta vía, que en la actualidad tiene poco uso, es estrecha. Apenas hay espacio para dos coches en paralelo. El regidor además afirma que el Concello asumirá el coste de los trabajos pese a que esta carretera es de titularidad de la Diputación de A Coruña. "Vamos a hacer la actuación aunque sea de la Diputación", asegura.

El regidor señala que el Concello ampliará la carretera hasta que se ajuste a las alineaciones que fija el planeamiento urbanístico del municipio. Calvelo también indica que el Gobierno local negociará con los propietarios de los terrenos afectados por la actuación. Con la puesta en marcha del polígono de Morás (la Xunta ya ha retomado la urbanización), este vial absorberá parte del tráfico que atraerá el nuevo parque empresarial, que también contará con un nuevo acceso a la autovía del Noroeste, la A-6, y la autopista A Coruña-Carballo, según recoge el proyecto sectorial. La travesía da Groufa permite ir desde el cruce de la panadería Rozas hasta O Alto de Arteixo, donde empieza la carretera que permite acceder al polígono de Morás.

Esta actuación se unirá a la que el Concello realizará en el cruce del bar O que faltaba, en O Alto de Arteixo. Allí pretende ampliar la intersección. El alcalde explica que en este caso se estudiará si el cruce será "con semáforo, con señales de preferencia" o con "una rotonda".

En la misma zona, la Xunta ya ha comenzado los trámites para añadir un carril más a la avenida Finisterre, en sentido Arteixo. El tramo en el que realizará la obra va desde la panadería Rozas hasta la calle Guerra de la Independencia.