El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, recordó ayer cómo el edificio y la finca que hoy es el parque y biblioteca de Rialeda en Perillo, se recuperaron gracias a varios talleres de empleo por los que pasaron unos sesenta jóvenes en los años noventa. Y apuntó que lo mismo pasará con la Finca Tenreiro, la impresionante propiedad de 30.000 metros cuadrados de parque público que adquirió el Concello con arbolado de gran valor, una finca cargada de leyendas y una vivienda derruida que con este taller se quiere recuperar totalmente. Los alumnos del tercer obradoiro de empleo recibieron ayer sus diplomas y García Seoane ya anunció que ha solicitado a la Xunta otro más, para terminar de rehabilitar totalmente el edificio principal, y que quiere que tenga un año de duración y no seis meses como los anteriores para que dé tiempo a concluir toda la obra.

Un total de quince alumnos menores de treinta años se formaron en los últimos seis meses como técnicos en carpintería y mueble en este taller que terminó el mes pasado y con el que, antes de finalizar, dos alumnos ya encontraron trabajo. Ayer el delegado territorial de la Xunta, acompañado del alcalde, entregó los certificados profesionales a los jóvenes participantes.

Durante seis meses estos alumnos fabricaron las cerchas y correas de madera laminada de la cubierta del edificio principal, realizaron la instalación de panel sandwich de madera con aislamiento y la colocación de rastrel primario en la madera de pino y lámina aislante. Hicieron también trabajos de carpintería en ventanas y puertas y a mayores, una pérgola. En los dos obradoiros anteriores restauraron la vivienda de los guardeses y recuperaron el estanque ornamental. El cuarto taller terminaría de restaurar la casa principal de la acaudalada familia Tenreiro.

El último taller supuso una subvención de más de 140.000 euros por parte de la Xunta. Seoane apuntó que en algo más de un mes sabrá si le otorgan el nuevo obradoiro.