Sobre el Monte das Arcas en A Zapateira, que comparten Culleredo, Arteixo y A Coruña, se construyeron en los últimos treinta años casas aisladas y urbanizaciones sin tener antes infraestructuras básicas ni dotaciones (no tenían pista deportiva hasta hace dos años), viales de verdad (más que pistas), líneas de transporte... y sobre todo se construyó sin planificación común por lo que toda esta zona es un ejemplo de descoordinación, falta de cohesión social, falta de movilidad, edificaciones totalmente agresivas con el entorno natural y vecinos aislados en sus urbanizaciones, sin un punto común de encuentro para interactuar, crear relaciones sociales. Una de las medidas que ha acordado el Concello cullerdense para tratar de paliar este problema es la construcción de un centro social del que podrán disfrutar los residentes en las urbanizaciones Vallesur y Los Olivos, donde viven cerca de un millar de vecinos.

El regidor, José Ramón Rioboo, ya ha mantenido una reunión con los residentes en estas zonas y ahora se analizarán "posibles ubicaciones", que se acordarán con ellos. En estas dos urbanizaciones existen muchas familias jóvenes con niños y necesitan espacios para compartir y lugares donde desarrollar actividades conjuntas.

El Ejecutivo quiere "fomentar el vínculo entre los vecinos de Vallesur y Los Olivos" y los del núcleo de Orro, parroquia a la que pertenecen y que les queda alejado. Rioboo pretende que organicen "actividades comunes", programas conjuntos.

Al mismo tiempo el Concello también va a ampliar el centro social de Orro, donde abrirá más salas para organizar actividades y renovará los aseos además de mejorar el inmueble en general. En estas dos urbanizaciones de A Zapateira el Ejecutivo municipal también va a renovar y modernizar el parque infantil. Ya tiene el proyecto redactado y aprobado.

Estas medidas se unen a otra también básica y largamente demandada en esta compleja zona, la del transporte público, ya que no llega a estos lugares a día de hoy.

Los regidores cullerdense y arteixán se reunieron y estuvieron de acuerdo en que era factible poner en marcha unas líneas comunes a los dos concellos. Pero además consideran que se podría mejorar el transporte con la ciudad de A Coruña, simplemente prolongando la línea 24 de Tranvías.

Esta prolongación daría servicio a muchísima población que trabaja en A Coruña y que no tendría que coger el coche.

Si Oleiros ha logrado en apenas un mes de gestiones que el bus 1A de A Coruña prolongue su ruta hasta Santa Cristina y que una compañía recorra Culleredo y Cambre recogiendo personas para la playa de Bastiagueiro, también se podrían poner los medios para que el transporte público llegase a una zona residencial supramunicipal que al margen de cómo surgió, hoy es una realidad y tiene mucha población que hay que atender.