Repsol ha solicitado a los concellos de Arteixo y A Coruña las licencias municipales para poder construir el poliducto que enlazará la refinería y las instalaciones que construirá en el puerto exterior de Langosteira. Así lo anunció la empresa, que ayer completó los trámites para presentar la solicitud. La obra para la que Repsol pide autorización municipal incluye la ejecución del poliducto y de un sistema de bombeo y regulación para el envío de crudo desde la dársena exterior. El proyecto de obra está valorado en 80 millones de euros.

La compañía energética no incluye dentro de su solicitud de licencia municipal la construcción del pantalán (no sujeto a licencia municipal, según confirman el Concello de Arteixo y Repsol) y unas modificaciones que deberá ejecutar en la propia refinería.

La ejecución del poliducto está un paso más cerca de ser una realidad. Repsol destaca que la solicitud de las licencias municipales supone, junto con el trámite expropiatorio, "el último hito administrativo" previo a la construcción del poliducto y sus instalaciones auxiliares.

Esta nueva infraestructura discurrirá 2.500 metros por Arteixo y 1.300 por A Coruña, lo que afectará a 168 fincas en total, aunque no todas tendrán que ser expropiadas, puesto que en algunas solo se prohibirá la realización de algunas actividades por razones de seguridad. El poliducto partirá de la refinería, en la zona de Nostián, y se acercará hasta la costa, después discurrirá en paralelo a la carretera de Bens a Suevos y llegará al puerto exterior por las proximidades del antiguo matadero de Mafriesa y de la autovía de acceso a Langosteira.

El poliducto medirá diez metros de ancho, por los que pasarán once líneas y dos más para los trabajos de vigilancia y mantenimiento. En paralelo al trazado se instalará un sistema de fibra óptica y una línea de alimentación eléctrica.

Esta nueva infraestructura es básica para que Repsol pueda trasladar la mayor parte de sus operaciones a Langosteira -Repsol efectúa ya en la dársena todas las operaciones de carga de productos sólidos, como el azufre y el coque-. El convenio que la petrolera firmó con el Puerto para la primera fase de su traslado de los muelles de A Coruña a los de Langosteira (incluye el 60% de sus operaciones) establecía el 14 de abril de 2018 como fecha para el inicio de operaciones en Arteixo, aunque ya condicionaba el cumplimiento de ese plazo a la obtención de los permisos necesarios. Repsol ya aseguró que intentará agilizar al máximo los trámites de la obra.

El coste estimado de la construcción del poliducto será de 80 millones de euros y el del nuevo pantalán de la dársena de Langosteira será de 36 millones, lo que supondrá una inversión total de 126 millones, según explicó Repsol.

La empresa anunció a finales de abril que solicitó a la Consellería de Industria el inicio de los trámites para la expropiación de los terrenos necesarios para la construcción del poliducto. Una vez la adquisición de terrenos reciba el visto bueno, el Gobierno gallego deberá "declarar el expediente de urgente ocupación" y "se convocará a los propietarios" afectados al levantamiento de las actas previas a la ocupación, momento en el que se ofrece el justiprecio, según afirmó Repsol.