El Club Náutico de Sada tiene la concesión de la antigua nave de rederos en el puerto, donde en 2010 se instaló el restaurante Tamei al alquilarle el local por diez años. En 2016 el club presentó una demanda y resolución del contrato por incumplimiento, reclamándole 48.400 euros a la empresa hostelera por el pago del agua y la luz. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 4 de Betanzos resolvió en 2017 darle la razón al Náutico y obligar al Tamei a pagarle esta cantidad más los intereses. El Tamei apeló y ahora la Audiencia Provincial acaba de revocar la sentencia inicial.

La Audiencia ha estimado la principal alegación del Tamei, que el presidente del Club Náutico, Enrique Tostado, carecía de legitimación porque no fue autorizado por la asamblea general para promover el pleito y solicitar la resolución del contrato. La Sala destacó que en el propio contrato de alquiler se especificaba que la resolución del contrato solo podría hacerse por mayoría de la asamblea general.