"La sensación que tenemos es que nos están echando del puerto de Sada, todo son largas...". Al presidente de la Asociación Cultural Mariñeira Os Patexeiros, Lucas Santolino, le cuesta disimular su desánimo tras años a la deriva en un mar de burocracia. A este colectivo, uno de las pocos de Galicia que lucha por recuperar la carpintería de ribera y conservar y preservar la memoria marinera, siempre le sopla el viento en contra cuando se adentra en aguas administrativas. El último escollo, el cierre de la rampa del puerto que utilizaban para fondear sus embarcaciones: "No hay voluntad por parte de Portos de darnos una llave", lamenta.

Sus dificultades para algo aparentemente tan simple como lograr un acceso en condiciones al puerto convierten en una quimera otra de sus aspiraciones. La asociación solicita desde hace años el apoyo de las administraciones para poder amarrar su flota tradicional en un pantalán en desuso de Sada: una lámina de agua abrigada que dé refugio a joyas como Balbina, "el último patexeiro".

Esta espectacular embarcación, conocida por todos los marineros de Sada, fue rescatada hace años del desguace. Única en su tipología y reconocida en el inventario del proyecto europeo Dorna, Balbina ha logrado recuperarse de las heridas de su naufragio en tierra firme gracias al trabajo de Os Patexeiros, pero carece todavía de una plaza en el puerto de Sada.

La asociación relata que en los últimos años ha dirigido varios escritos a Portos de Galicia para solicitar la cesión de un pantalán a un precio asumible que les permita crear un "museo al aire libre" con sus quince embarcaciones tradicionales. "Podría convertirse en un atractivo turístico. Nosotros somos una asociación sin ánimo de lucro y no tenemos suficientes recursos para costearlo", Lucas Santolino.

"Estamos cansados de presentar papeles y de llamar para nada", lamenta otra integrante del colectivo, que cree que la falta de respuesta por parte de la Xunta solo demuestra su desinterés y falta de compromiso con la recuperación de la tradición marinera.

El colectivo celebrará hoy una nueva edición del Encontro Patexeiro de Embarcacións Tradicional, que se ha convertido en un clásico de las Festas do Carmen. Es habitual escuchar en este encuentro preguntar por Balbina. "No hay marinero en Sada que desconozca de quien se habla cuando se le pregunta por Balbina", afirman con orgullo desde el colectivo. Ahora solo falta que la Administración repare en la pequeña flota que han conseguido reunir la Asociación de Patexeiros para que puedan hacer realidad su aspiración: recordar el pasado marinero de la villa con una exposición permanente, un museo al aire libre en un pantalán del puerto que dé abrigo a su último patexeiro.