La Xunta ha licitado la gestión de las expropiaciones para ejecutar el enlace entre la vía ártabra y la autopista AP-9 sin haber recibido el informe preceptivo del Ministerio de Fomento. El Gobierno gallego admite que necesitará contar con el visto bueno del departamento estatal para poder contratar los trabajos, pero justifica que ha decidido "anticipar la licitación del servicio de expropiaciones con el objetivo de disponer de los terrenos necesarios para la ejecución de las obras en el momento en que se firme el contrato de las mismas, evitando así demora". El Ejecutivo autonómico señala que "ese trámite dependiente de la Administración general del Estado es preceptivo para que el Gobierno gallego pueda iniciar la contratación de las obras, que se está viendo retrasada".

El concurso público para gestionar las expropiaciones ya se encuentra abierto en la Plataforma de Contratos de Galicia por 68.395,48 euros, afirma la Xunta. El próximo día 27 de julio es la fecha límite para la presentación de ofertas.

Con esta convocatoria, "se avanza en los trámites necesarios para ejecutar la conexión entre la N-VI y la autopista", señala la Xunta, que invertirá en este enlace 35 millones de euros para "completar la funcionalidad de esta infraestructura clave para el área de A Coruña". Las expropiaciones que se gestionarán con este contrato suponen una ocupación de 270.060,51 metros cuadrados repartidos en 244 fincas en los concellos de Cambre, Oleiros y Sada. Además, 29.978,37 metros cuadrados se expropiación de modo temporal, ya que se ocuparán para la ejecución de las obras y a su finalización se devolverán a sus propietarios. También se ocuparán 23.724,25 metros cuadrados como servidumbres de redes de servicios que se deben recolocar. El coste estimado de las expropiaciones es de más de 1,5 millones de euros.