La construcción de una gasolinera en las inmediaciones del barrio de A Condesa ha reabierto en Betanzos el debate sobre la ubicación idónea de este tipo de instalaciones. El grupo municipal de Betanzos Novo se sumó ayer a las críticas del BNG al entender que la licencia concedida para la construcción de esta estación de servicio en una zona residencial "es contraria a los intereses generales de Betanzos".

La formación que lidera Hipólito Pérez elevará hoy una moción a pleno para instar al Gobierno local a elaborar una ordenanza que regule las distancias mínimas de las nuevas gasolineras a los núcleos de población y los equipamientos educativos, sanitarios y asistenciales. Betanzos Novo reclama también al Ejecutivo que modifique las normas subsidiarias del planeamiento para prohibir la implantación de gasolineras en suelo urbano residencial y en núcleos rurales.

Los motivos que han llevado a Betanzos Novo a cuestionar la implantación de la gasolinera de Ozagas Galicia en A Condesa son muy similares a los del BNG. Ambas formaciones consideran que su ubicación en un barrio residencial no es la idónea "dada la peligrosidad de las instalaciones, en las que se van a almacenar y manipular combustibles inflamables", como argumenta Betanzos Novo en su moción. Los dos grupos cuestionan además la necesidad de esta estación de servicio, dado que existen cinco gasolineras en funcionamiento en el término municipal, dos dentro de la ciudad y otras tres en las proximidades.

La formación que encabeza Hipólito Pérez sostiene también que la localización de esta estación de servicio en las proximidades de la intersección de la vía de circunvalación con los accesos al barrio de A Condesa y al Pasatempo dificultará la circulación viaria en una zona con una importante intensidad de tráfico.

El Gobierno municipal ha evitado hasta ahora pronunciarse sobre esta polémica. El Ejecutivo que lidera la socialista María Barral se ha limitado a decir que la empresa promotora dispone de todos los informes favorables, por lo que no puede oponerse. Betanzos Novo admitió ayer que las licencias urbanísticas "son de naturaleza reglada", por lo que efectivamente deben concederse siempre que las obras proyectadas respeten la ordenación urbanística.

Por ese motivo y para evitar que se produzcan situaciones similares en un futuro, la formación reclama que se modifique el planeamiento al entender que el vigente, de 1996, plantea un modelo de crecimiento "obsoleto", "basado en la especulación inmobiliaria", "la expansión urbana incontrolada" y que propició "la destrucción de gran parte del parque histórico del Pasatempo".