La construcción del poliducto de Repsol que conectará la refinería y el puerto exterior de Langosteira requiere la expropiación de 98 solares en Arteixo. La empresa inició el pasado lunes el levantamiento de las actas previas a la ocupación (momento en el que se les ofrece el justiprecio) de las parcelas afectadas por esta nueva infraestructura. Lo hizo con los afectados de Arteixo. En este trámite están presentes representes de la Xunta, Repsol y del Ayuntamiento.

La Consellería de Economía, Emprego e Industria convocó entre el lunes y ayer a los propietarios de las 98 fincas afectadas de Arteixo para el levantamiento de las actas previas a la ocupación de sus parcelas (por las que discurrirá el poliducto), que es el momento en el que se les ofrece el justiprecio. Hoy y mañana será el turno de los expropiados con terrenos en A Coruña, que deberán acudir al centro cívico de A Silva para conocer el justiprecio. En este caso la obra requiere la expropiación de 66 parcelas.

Repsol abrió en Suevos una oficina de atención informativa a los propietarios de los terrenos por los que discurrirá el poliducto. Estuvo ubicada dentro del local social del club de fútbol de Suevos y permaneció abierta hasta el 7 de septiembre. La empresa explicó que el objetivo de esta oficina fue "exclusivamente resolver las dudas e informar a los propietarios de todos los trámites necesarios para que puedan acudir con toda la documentación correcta al levantamiento de las actas previas de expropiación".

La empresa solicitó licencia de obra en el Concello de Arteixo el pasado mes de mayo. El Gobierno local explica que espera a recibir los vistos buenos de otras administraciones públicas.

La obra para la que Repsol pide autorización municipal incluye la ejecución del poliducto y de un sistema de bombeo y regulación para el envío de crudo desde la dársena exterior. El proyecto de obra está valorado en 80 millones de euros.

La compañía energética no incluyó dentro de su solicitud de licencia municipal la construcción del pantalán (no sujeto a licencia municipal, según confirmaron el Concello de Arteixo y Repsol) y unas modificaciones que deberá ejecutar en la propia refinería.

Repsol destacó que la solicitud de las licencias municipales supone, junto con el trámite expropiatorio, "el último hito administrativo" previo a la construcción del poliducto y sus instalaciones auxiliares. Esta nueva infraestructura discurrirá 2.500 metros por el término municipal de Arteixo y 1.300 por A Coruña.