El PSOE de Miño votó ayer en el pleno en contra de la aprobación de la cuenta general de 2017 porque no era un "fiel reflejo de la realidad económica municipal" porque ni el balance ni la memoria recogen el "potencial riesgo" del pago de los intereses a los expropiados" de Fadesa (9 millones) ni la deuda por las fincas aún sin abonar (2,2 millones).