La interpretación que hacen del informe autonómico el Ejecutivo municipal y formaciones como Anova o BNG es diametralmente opuesta. El Gobierno local afirma que la Xunta no frena el proyecto y que solo obliga a "ajustar algunas cuestiones", en concreto, la incorporación de la rotonda prevista para mejorar la seguridad en la AC-164. El Concello de Bergondo no hace alusión a las dudas manifestadas por los técnicos autonómicos sobre las alturas máximas previstas para la zona residencial y terciaria o sobre la falta de un estudio que justifique la existencia de servicios básicos suficientes para el incremento residencial. Desde el Ayuntamiento afirman que los responsables de Urbanismo de la Xunta les trasladaron en un encuentro que la modificación es viable y "se encuentra dentro de unos parámetros concretos".

Anova y BNG afirman por el contrario que la resolución autonómica demuestra que la modificación puntual del planeamiento "incumple los requisitos mínimos". Anova afirma que deja en evidencia las "prisas y la improvisación" y acusa al Gobierno local de pretender favorecer "a los mismos de siempre". El BNG, en la misma línea, destaca que fue la única formación que alegó contra este "despropósito" y considera que la Xunta le da la razón.