La Fiscalía Provincial de A Coruña ha presentado en el Juzgado de Guardia un escrito en el que solicita que se investigue por indicios de prevaricación administrativa la decisión del alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo, de subrogar a once trabajadores de la concesionaria de la recogida de basura del Consorcio As Mariñas, Ferrovial Cespa. El Ministerio fiscal abrió diligencias tras recibir un escrito de la interventora municipal, que se había opuesto a la incorporación de este personal al entender que no se daban los requisitos legales para realizar la subrogación, con lo que puso un reparo suspensivo de legalidad. El Concello asegura que defenderá la creación de estas plazas para prestar el servicio municipal de recogida de residuos.

La Fiscalía, en un comunicado remitido a los medios de comunicación, considera que pueden ser "discutibles" los fundamentos de la decisión del alcalde de aprobar la subrogación de cinco empleados con la cláusula de retorno, que trabajaron en el Concello, después fueron subrogados en el Consorcio As Mariñas y han vuelto de nuevo al Ayuntamiento. En cambio, argumenta que la decisión de incorporar al resto de operarios no es discutible. Considera que hay indicios de un posible delito de prevaricación, tipificado en el Código Penal como la acción de una autoridad o funcionario público que, "a sabiendas de su injusticia", dicte "una resolución arbitraria en un asunto administrativo".

La investigación de Fiscalía se inició en septiembre tras un escrito presentado por la interventora "poniendo los hechos en conocimiento de la Fiscalía", según asegura el Ministerio fiscal.

El alcalde, Carlos Calvelo, defiende que no ha cometido ninguna ilegalidad y asegura que "una directriz europea" y el "artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores" marcan "el derecho de subrogación". "Tenemos clara la defensa de los puestos de trabajo. Hay una sucesión de empresas", señala. También explica que si el Concello no hubiera procedido a la subrogación de los once operarios "la otra opción era despedir" y que fueran al juzgado a reclamar. Calvelo además destaca que el informe elaborado por la técnica de Personal del Concello avala la subrogación de los once operarios de la concesionaria de la basura del Consorcio para mantener "un servicio público esencial".

La subrogación de los trabajadores para su contratación como personal laboral indefinido temporal se realizó pese a que Intervención había puesto un reparo suspensivo de legalidad. Lo último que la interventora puso en su informe, antes de la fecha y la firma, fue, en negrita: "Corresponde al pleno municipal el levantamiento del presente reparo". Sin embargo, el reparo no se trató en pleno. El regidor lo levantó mediante un decreto de Alcaldía.

La incorporación de estos once operarios que trabajaban en la concesionaria de la recogida de la basura del Consorcio al Concello se produjo el pasado verano, cuando el Ejecutivo municipal puso en marcha el nuevo servicio municipal de retirada de residuos.

El Gobierno local defendió en el momento de realizar la subrogación que tiene la "obligación" de incorporar a estos operarios que prestaban el servicio del Consorcio en Arteixo y en caso de no hacerlo, "la obligación de asumir las correspondientes indemnizaciones por los despidos de los afectados". También indicó que "los informes técnicos emitidos" concluyeron que en este caso se daban "los condicionantes legales para que opere la sucesión empresarial".

Informes contradictorios

El Gobierno local acordó la subrogación de los once trabajadores con informes técnicos contradictorios. La interventora municipal concluyó en su informe que fue una decisión "sin fundamento legal ninguno" porque el Concello "nunca ha tenido, ni tiene en la actualidad, vínculo contractual con Cespa".

El jefe del área de Servizos Xerais elaboró otro informe en el que concluyó que cinco de los once empleados (que trabajaron en el Concello, después fueron subrogados en el Consorcio As Mariñas y han vuelto de nuevo al Ayuntamiento) tendrían derecho a incorporarse a la plantilla municipal. Los otros seis, no. "En rigor no supondría una subrogación, sino la aplicación de los efectos de un acto administrativo dictado en 2001 que garantizaba su reingreso como empleados públicos", aseguraba.

El informe de la técnico de Personal del Concello concluyó que sí se cumplían las condiciones para realizar la subrogación de los once trabajadores, aunque debía quedar "absolutamente acreditado" que estos trabajadores estaban adscritos "únicamente y exclusivamente" a las rutas de Arteixo.