El Gobierno local de Arteixo ha aprobado adjudicar a Canarga la construcción de las aceras del núcleo de A Cachada, en la parroquia de Monteagudo, que tendrán una longitud de 1,6 kilómetros. Los vecinos esperan por esta obra desde hace diez años. La empresa ejecutará los trabajos por un importe de 511.000 euros, lo que supone una reducción de aproximadamente un 20% sobre el precio de licitación. La Junta de Gobierno Local aprobó ayer la adjudicación del contrato a Canarga. Ahora la empresa y el Concello deberán formalizar el contrato.

El plazo de ejecución de la obra es de cinco meses en total. El proyecto de obra recoge que esta actuación servirá para mejorar y adecuar la "seguridad vial" en la carretera que atraviesa A Cachada, que soporta una "alta tasa de tráfico". También señala que esta senda peatonal "mejorará la comunicación entre la población residentes en sus márgenes, comunicando los núcleos localizados en ella".

La acera servirá para dar continuidad al itinerario peatonal ya construido en esta carretera en el tramo que discurre desde Paiosaco y A Barreira, en A Laracha, hasta el límite con Arteixo. La carretera que atraviesa A Cachada, cuya titularidad es de la Diputación de A Coruña, tiene una plataforma con un ancho de 5,5 metros, que pasará a ser de 8 metros tras la obra. Los carriles de circulación medirán 3,50 metros cada uno.

El Concello necesitó ejecutar la expropiación de los frentes de casi 40 fincas para poder ejecutar esta obra. El Gobierno local había logrado la cesión de otras 50 fincas para esta actuación.

A Cachada es un núcleo rural que está ubicado entre los municipios de Arteixo y A Laracha. En el segundo caso ya disponen de las aceras desde el año 2008 y en el lado arteixán los vecinos reclaman desde entonces su construcción, ya que esta carretera carece de arcenes.

El origen de esta diferencia es que la construcción de esta senda (tanto en el lado larachés como en el arteixán) iba a ejecutarse en 2008 a través de un plan de la Diputación. Los ayuntamientos debían conseguir los terrenos. A Laracha cumplió y Arteixo (con el Gobierno de PSOE y TeGa) no lo hizo, con lo que se quedó sin la obra. El actual alcalde, Carlos Calvelo, según explicaron los vecinos, se comprometió durante la campaña electoral de 2011 a dotar al núcleo de las infraestructuras necesarias, pero la construcción de esta senda peatonal todavía no es una realidad siete años después.