El pequeño núcleo rural de O Tres, en Vilarmaior, vivirá en unos años una auténtica transformación urbanística. El Ayuntamiento ha dado luz verde definitiva a un plan de sectorización que comenzó a tramitar hace una década con el objetivo de convertir una zona forestal con dominio de eucaliptos y pinares en un parque empresarial con naves de hasta diez metros de altura.

El Gobierno local espera que esta operación, promovida por un grupo de empresarios locales que poseen más de la mitad de los terrenos contribuya a frenar el "éxodo rural" que ha sufrido este municipio de 1.249 habitantes con una tasa de envejecimiento que triplica la gallega.

El sector, de 6,4 hectáreas, el equivalente a unos seis campos de fútbol, se sitúa en las inmediaciones de un antiguo aserradero en fase de desmantelamiento y muy próximo a Miño y al núcleo de O Tres, famoso en la comarca en otros tiempos por su feria.

El plan general clasifica los terrenos como suelo urbanizable delimitado y fía en su transformación a suelo urbano industrial el futuro del municipio. La memoria urbanística pone el acento en el hecho de que gran parte de los vecinos desempeñan su trabajo en otros municipios y destaca que los promotores del parque industrial son empresarios locales interesados en el "desarrollo endógeno" de Vilarmaior.

Las obras de urbanización de este parque empresarial tendrán que ejecutarse en el plazo máximo de tres años a contar desde la aprobación del plan de urbanización. Según recoge el proyecto, el polígono se organizará en torno a seis manzanas y los trabajos para preparar los terrenos y dotarlos de servicios ascenderán a cerca de 1,3 millones. El Ayuntamiento asumirá los gastos de conservación y estima que serán muy inferiores a los ingresos por impuestos.

El Concello tuvo que sortear más de una dificultad en la tramitación de este parque empresarial. La Xunta puso en duda la viabilidad de la operación y requirió también medidas para minimizar el impacto paisajístico y ambiental de este desarrollo.

El plan de sectorización recoge una serie de medidas con las que pretende "integrar el polígono en el núcleo rural de O Tres". Entre otras actuaciones, los promotores prevén localizar las dotaciones en la zona de transición con la aldea para amortiguar el impacto. El proyecto recoge ubicar la zona verde en noreste para reducir el impacto en el entorno del río Xordos.

Superados los escollos, la comisión gestora deberá presentar ahora el preceptivo proyecto de urbanización y dispondrá de un plazo de tres años para ejecutar los trabajos. El tiempo dirá si el Concello acertó en sus vaticinios y este polígono industrial se convierte realmente en el revulsivo de Vilarmaior.