No falla. En cuanto se producen fuertes lluvias y de forma continuada, toda la tierra de las obras para ejecutar la urbanización del futuro sector de 700 viviendas y campo de golf de Xaz llega a la playa de Santa Cruz a través del río y tiñe de color marrón toda la bahía.

Esta mañana el mar que rodea el castillo de Santa Cruz era aún más marrón que en otros episodios similares. Todas las medidas tomadas por la empresa que ejecuta estas obras, López Cao, con la instalación de hasta 25 balsas de decantación e incluso barreras anticontaminación tras requerimientos de Augas de Galicia, se demuestran insuficientes o no efectivas con episodios como el de esta mañana, con la enésima riada y una de las más espectaculares.

Augas firmó hace unos días la orden de paralización de los trabajos, salvo los destinados a poner medidas contra estos vertidos de tierra, pero aún así se producen debido a que existe un millón de metros cuadrados de lo que antes era un valle, ahora deforestado, sin cubierta vegetal de ningún tipo y por lo tanto con la tierra suelta, sin ninguna planta que la agarre y que por lo tanto con las precipitaciones llega a los regatos y de ahí al río que desemboca en la playa de Santa Cruz.

Responsables de la propia adjudicataria indicaban hace unas semanas la dificultad de evitar estos vertidos en momentos de fuertes lluvias. La única solución posible por lo tanto sería hacer las obras solo durante el buen tiempo.