El Concello de Culleredo asegura que iniciará "de inmediato" un estudio pormenorizado y en detalle del anteproyecto del vial 18. El alcalde, José Ramón Rioboo, encargó ayer a los técnicos el análisis del documento "de cara disponer de toda la información de forma fehaciente" tras conocer la publicación del trazado revisado de la conexión para determinar si presenta alegaciones, como hizo con la primera propuesta el Ejecutivo central. El alcalde se reunirá con los vecinos para conocer sus impresiones del nuevo trazado propuesto por el Ministerio de Fomento.

El Ayuntamiento sostiene que el estudio encargado abordará también "aspectos de calado para los vecinos, como el trazado, accesos a los núcleos, las expropiaciones, afección del ruido, medidas minimizadoras del impacto ambiental o las infraestructuras de servicio". El regidor cullerdense asegura que es "consciente de los beneficios que supondrá para el área metropolitana un enlace directo entre la autopista y la tercera ronda" y de que "es un vial incluido en el plan de carreteras y que permitirá aprovechar la AC-14 para acceder a la ciudad, disminuyendo la dependencia de la avenida de Alfonso Molina". Sin embargo, apunta Rioboo en un comunicado a los medios, "dado que el principal impacto de la infraestructura se producirá en Culleredo", considera "justo y lógico" que el vial 18 "sirva para favorecer también la movilidad a los vecinos" del municipio.

El alcalde convocará reuniones con los vecinos afectados una vez disponga del análisis técnico. Las conclusiones de estos estudios "serán las que determinen las posibles alegaciones a formular en este período de exposición al público", que está abierto hasta el próximo 4 de marzo.

Los mismos servicios que el Gobierno local cullerdense reclama ahora para la conexión de AP-9 y tercera ronda fundamentaron las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento en 2005 al proyecto inicial del vial. "Reducir el impacto de la infraestructura en el municipio y establecer mejoras para que den servicio a los vecinos, como accesos o viales", en lugar de convertirse en "una barrera", centraron las reclamaciones del Concello a la primera propuesta.

El Ayuntamiento presentó ocho alegaciones, que habían sido apoyadas por unanimidad en el pleno de la Corporación municipal. Entre las propuestas o reclamaciones se encontraba la ejecución de un falso túnel junto al colegio Andaina, que permitiría llevar a cabo el proyecto de ampliar las instalaciones educativas ya presentado. Además, se sugirió la construcción de acceso al vial desde Vilaboa, lo que daría servicio a unos 10.000 vecinos. El Gobierno local criticó también que el proyecto no previese viales paralelos de servicio, por lo que reclamó que se incluyesen. También se reclamaron mejoras en el sistema de recogida de aguas pluviales, para evitar molestias por inundaciones en predios, como sucedió con la tercera ronda.