Petroprix Energía S.L., empresa a la que la Xunta le abrió expediente sancionador el pasado mes de diciembre por carecer de autorización previa de Augas de Galicia para la gasolinera que construyó en
O Temple en Cambre, acaba de solicitar ese permiso.
El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) publicó ayer la solicitud de Petroprix a Augas de Galicia de autorización de obras, un trámite que debería haber hecho antes de construir la gasolinera. Sin embargo, ahora que ya está ejecutada la instalación, que es de autoservicio, se tramita este permiso, imprescindible porque está en las márgenes del río San Pedro (que viene desde Oleiros).
Tras la publicación de esta solicitud ayer, se abre un plazo de veinte días, contados a partir de hoy, de información pública, en que cualquier persona puede acudir a ver el expediente o presentar alegaciones o reclamaciones. Podrá hacerlo tanto en el propio Concello de Cambre como en las oficinas de Aguas de Galicia en los nuevos ministerios en A Coruña (planta novena).
Augas advirtió al Concello de Cambre el pasado mes de julio ya que había abierto expediente sancionador a la empresa por ejecutar la estación de servicio sin autorización previa, alertándole así que el Gobierno local no debía darle licencia hasta tener dicho permiso.
La Consellería de Economía, Emprego e Industria fue la que determinó el cierre y precinto de la instalación por varias irregularidades en el recinto, como la ubicación de los tanques de almacenamiento y los surtidores, que incumplían la normativa del sector.
La empresa, tras el cierre de sus instalaciones por parte de la Xunta, colocó un cartel que informaba de que estaba cerrada la gasolinera "temporalmente" por "obras de reforma y mejora".
Cuando se iniciaron los trabajos de ejecución de esta estación de servicio ya hubo protestas entre los vecinos debido a que se ubica a pocos metros de edificios de viviendas y un parque infantil, pero la parcela en la que se construyó tiene la clasificación de suelo urbano industrial. Debido a este caso el Concello en septiembre de 2017 suspendió licencias de gasolineras durante un año, en previsión de modificar la normativa urbanística para limitar su presencia.
