Los malos de los cuentos, pitufos, detectives y ladrones y hasta animales marinos desfilaron ayer por la comarca en la despedida de las clases antes del Carnaval. Pequenos de colegios de Culleredo, Abegondo o Cambre desfilaron por las calles o celebraron encuentros en sus recintos escolares para ponerse en la piel y en los trajes de personajes fantásticos, profesionales o seres de otras especies.

El colegio de Tarrío llevó al paseo de la ría a unos 750 niños disfrazados de Os malos dos contos, explicó su directora, Ana Liñares. Maléfica, El Grinch, lobos, brujas o cuervos desfilaron junto a la ensenada, con trajes elaborados junto a sus padres, "muy implicados", contó Liñares. También en Culleredo, los niños del Centro Rural Agrupado (CRA) encarnaron a detectives y cacos y lucieron sus disfraces en el pabellón de Almeiras.

En Abegondo, niños del colegio de San Marcos realizaron un desfile por el centro del núcleo. Tiburones, caballitos de mar, pulpos o cangrejos recorrieron las calles abegondesas, custodiados por buceadores: sus profesores. El colegio Wenceslao Fernández Flórez de Cambre realizó un desfile y una fiesta a la que se sumó la gaiteira Susana Seivane.