El silencio nocturno ansiado por los vecinos de O Burgo tendrá que esperar. La Valedora do Pobo informó la semana pasada de que esperaba desde enero un informe del Concello sobre un local con quejas vecinales desde hace meses por reiterados ruidos de noche. El Ayuntamiento asegura que ya ha remitido ese escrito al organismo autonómico y que le ha solicitado más tiempo para completar un estudio de ruidos que prevé realizar sobre el local, ubicado en la calle Sanjurjo de Carricarte.

Las quejas por los ruidos y hasta peleas asociadas a este establecimiento de ocio nocturno vienen ya de 2018. Los vecinos presentaron varias protestas por registro al Ayuntamiento desde el pasado septiembre y recurrieron a la Valedora do Pobo. El PP preguntó en pleno por la situación del local y exigió al Gobierno municipal que remitiese la documentación requerida a la Valedora y que hiciese cumplir la normativa.

Vecinos afectados aseguran que el local genera ruidos por música y bullicio y abre hasta por la mañana. "Yo vivo en un quinto piso y oigo la música, imagínate cómo estarán los que viven en el primero o el segundo. Y han llegado a timbrar de madrugada. Ahora ya descuelgo el telefonillo de noche. Es un sinvivir", asegura Carlos Rey, uno de los residentes afectados que ha denunciado las reiteradas molestias. "Abren hasta las 10.30 y, estos últimos días, hasta las 12.30 horas. Y el alcalde lo sabe y no hace nada", protesta esta residente en Sanjurjo de Carricarte.

En enero, la Valedora reiteró su demanda de documentación al Concello. En concreto, solicitaba un informe pendiente. La semana pasada, el organismo autonómico informó a un denunciante de que ese mismo día, 13 de marzo, había "requerido nuevamente al Concello de Culleredo el correspondiente informe complementario demandado en fecha de 29 de enero de 2019".

El Ayuntamiento aseguró ayer que ya ha remitido ese informe a la Valedora y que le ha demandado más tiempo para presentarle también un estudio de ruidos. El Concello asegura que pretende realizar mediciones sobre el local sin previo aviso para contrastar la situación real. Una vez que se complete este informe, el Concello abrirá un expediente de infracciones al negocio. Asegura que tendrá "tolerancia cero" pero necesita "una base" para actuar contra las infracciones.