Los vecinos de Oza-Cesuras han recibido durante los últimos días en sus domicilios una carta del Concello con una petición más que inusual. A escasos dos meses de las elecciones municipales, el Ayuntamiento invita a los residentes a "indicar sus preferencias en cuanto al tipo de suelo en el que queden incluidas sus propiedades" en el plan general.

"Es intención de esta Alcaldía que el PXOM sea lo más beneficioso posible para los vecinos y propietarios", argumenta el Concello en la misiva, que incluye un breve formulario que los residentes deben cumplimentar con las referencias catastrales de sus parcelas y el tipo de calificación que les gustaría para sus propiedades así como los motivos en los que basan su elección.

"Una vez recibidos los formularios, los enviaremos al equipo redactor para su valoración", concluye la misiva del Concello, que encabeza un lema en grandes letras y en negrita: Construido o noso plan. Los procesos participativos en la elaboración de los planeamientos son habituales, pero los ayuntamientos se limitan por norma a recabar las sugerencias de los vecinos en cuanto a equipamientos o zonas verdes, y no sobre la calificación de sus fincas.

La petición ha sido acogida con estupor por la oposición, que recuerda que la función de un plan general es, precisamente, dejar de un lado intereses particulares y planificar de forma racional y ordenada el territorio para garantizar un crecimiento sostenible. La portavoz del PSOE, Pilar Pedreira, considera que esta misiva no es más que "publicidad engañosa" con la que el Gobierno local (PP) pretende obtener réditos electorales tras agotar el mandato sin informar de ningún avance en la redacción del PGOM.

El BNG calificó ayer de "irresponsable" esta "ocurrencia" del Ejecutivo que preside Pablo González Cacheiro y lamentó que el PP entienda por participación en el diseño del PXOM "que cada quien establezca la ordenación que considere para sus fincas". En la misma línea que el PSOE, la nacionalista Estefanía Busto criticó que en lugar de diseñar el PXOM "con criterios lógicos sobre las necesidades reales de vivienda o servicios públicos", el PP "esté centrado en vender favores y atender intereses particulares para hacer clientelismo".