El Concello de Curtis podría recibir el título de pionero profesional. Lo ha sido en un proyecto de investigación sobre la violencia de género en el rural; en otro de terapia con perros para menores expuestos al maltrato; en un sistema de señalización inteligente en un cruce de carreteras para aumentar la seguridad vial; en aplicar la Ley gallega de Montes instalando carteles advirtiendo de las distancias por los incendios; y ahora va a serlo de nuevo al menos en la comarca, al implantar el sistema de pictogramas que ayudan a integrar a las personas que tienen trastornos del espectro autista, informan y les tranquilizan.
El Concello va a instalar en los edificios públicos y en los locales comerciales distintos pictogramas que informan de qué lugar es y sus áreas, lo que facilita la identificación a las personas con alteraciones en la comunicación, la interacción y el lenguaje. El Centro de Información a la Mujer (CIM) ya trabaja con los colegios y con los comerciantes para establecer con ellos unas pautas de trabajo y de concienciación para conseguir entornos más accesibles. También impartirá talleres sobre autismo, el primero mañana lunes en el Centro Etnográfico de Teixeiro, en relación a la infancia.
