La Audiencia Provincial de A Coruña ha anulado la sentencia que condenaba al alcalde de Cerceda, José García Liñares, a año y medio de prisión y 16 años de inhabilitación por prevaricación y fraude por las obras del botánico y ordena repetir el juicio con otro magistrado distinto debido a que considera que en la vista que analizó los hechos quedó comprometida la "imparcialidad judicial". De este modo, prospera el recurso interpuesto por la defensa del regidor, que fue defendido por el letrado Ulises Bértolo, de Bermor Abogados.

El nuevo fallo concluye que "se observa que el desarrollo" del juicio, dirigido por José Antonio Vázquez Taín, "presenta episodios que no son propios de una normal dirección de los debates", en la medida en que "los comentarios sobre la forma de la prueba o su contenido son ajenos a la dirección del debate y comprometen la imparcialidad judicial".

El abogado defensor, Ulises Bértolo, manifiesta que es la primera vez en su carrera profesional que se ha visto "obligado a plantear en un recurso la nulidad de un juicio por falta de imparcialidad del juez". "Fue francamente difícil ejercer la defensa en unas condiciones tan hostiles y frustrante ver cómo todas las pruebas que tenían que haber llevado a la absolución de los acusados fueron directamente silenciadas en la sentencia", asegura.