El Concello de Abegondo asegura que tramitará esta semana la devolución de los avales requeridos a los vecinos interesados en que las normas provisionales de urbanismo permitiesen edificar en sus terrenos, en núcleos rurales con nula o poca actividad en los últimos años. Fueron quince los propietarios que depositaron avales, precisa ahora el Ayuntamiento, que impulsó la medida tras la anulación del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) „por prever una edificabilidad excesiva„ como modo de restringir los suelos edificables con "garantías reales" de que en los que se clasificaran como edificables se llevará a cabo una construcción. El Concello requirió depósitos de 1.500 euros o contratar avales bancarios, que el secretario aconsejó devolver, en febrero de 2018, "a fin de evitar suspicacias o temores infundados" entre los vecinos.

El Ayuntamiento abegondés anunció un mes después del informe del habilitado nacional que devolvería los avales cuando se aprobara la ordenación provisional. La medida, impulsada tras la anulación del PXOM por el Tribunal para permitir desarrollos en el municipio mientras se elabora un nuevo documento urbanístico, entrará en vigor el próximo día 1 de mayo, anuncia el Gobierno municipal.

En cuanto la normativa se ponga en marcha, los vecinos con suelos edificables podrán solicitar licencias para obrar. La ordenación provisional, que el Gobierno local aprobó en solitario, recoge 85 núcleos, frente a los 141 previstos en el plan anulado. El nuevo proyecto urbanístico, cuyo borrador prevé presentar a finales de este verano la empresa redactora, mantendrá los 85 núcleos de la norma provisional.

El arquitecto responsable sostuvo en el último pleno municipal que el plan general debe apostar por fomentar el "carácter rústico" del municipio y consideró "demasiado ambiciosos" los desarrollos proyectados en el plan anulado para los núcleos de San Marcos y San Tirso. Apuntó que el crecimiento previsto en el anterior PXOM, motivo fundamental de su anulación, era "demasiado optimista". El alcalde, José Antonio Santiso, admitió por primera vez en esa sesión plenaria que la anulación del anterior plan general es "razonable".