Tras 24 años “en primera línea”, la histórica concejal de Culleredo y actual responsable del área de Educación, Carmen Varela,renuncia a repetir en las próximas elecciones. Asegura, eso sí, que seguirá dispuesta a colaborar con sus compañero de partido y a ayudar a los vecinos.
¿Por qué se marcha?
Se acabo un ciclo. Son 24 años en primera línea. Hay que cambiar, descansar y pasar a la segunda línea.
¿Por qué toma la decisión?
Porque había que tomarla en algún momento. Cuando es el mejor momento nunca se sabe. En este momento más o menos la educación en Culleredo, pese a algunos problemillas de última hora, está más o menos bien organizada, si la Consellería de Educación no lo estropea. Nosotros, como Concello, ahora mismo estamos bien.
¿Ha cumplido sus objetivos?
Efectivamente. Nunca está todo al 100%en la vida, y en educación más porque es un tema vivo, pero estamos satisfechos.
¿Cuáles han sido sus mayores aciertos y errores?
Creo que son más los aciertos que los errores. Desde que estoy yo en Educación, se hicieron dos institutos, dos colegios, trajimos la Escuela de Idiomas, el Conservatorio es un referente en el área... Pasé por Bienestar Social, Promoción Económica, llevé temas sanitarios...El centro de salud me tocó a mí lucharlo y conseguirlo. Y conseguimos que tuviera una unidad de salud mental.
¿Y en qué se equivocó?
Está muy mal decirlo, pero ahora mismo no soy consciente. No lo sé. Seguramente uno se equivoque, pero así en algo… no soy consciente.
¿Algo pendiente?
Ahora mismo estamos luchando porque no cierren una unidad de Infantil una línea del Díaz Pardo y conseguir que los adscritos al Rego de Trabe tengan plazas. Por lo demás, todo aquello que nos propusimos, ahí está. Quedaría conseguir que la Xunta reorganice y Culleredo tenga un mapa educativo bien definido, pero eso ya no es competencia mía. Nosotros cumplimos con el mantenimiento y fuimos pioneros, por ejemplo, en los campamentos de conciliación y hemos ganado un premio por la lucha contra el absentismo escolar. Todo es mejorable, pero no tenemos nada que envidarle a ningún Concello.
¿Qué le dijeron sus compañeros al anuncio de irse?
A veces son decisiones de última hora. Me dijeron que si estaba contenta, adelante. Que enhorabuena y punto. Y recibí muchos whatsapps de gente que me pedía que lo pensara bien, que no me fuera.
Se emocionó mucho en la despedida de Sacristán. ¿Seguiría si él continuase?
Lo vi tan emocionado a él que me emocioné. Yo soy fácil de emocionar. Nunca puedes decir qué pasaría si. Si yo hubiera aprobado las oposiciones de magisterio a lo mejor no sería política. Las decisiones que se toman en la vida están bien tomadas.
¿Qué tal su relación con el equipo de Gobierno?
Fantástica.
¿Cómo vio la integración en el PSOE de ACdC?
Bien.
Gente del PSOE lo rechazó.
Pero no era yo. Nunca dije nada en contra. Todo lo contrario.
¿En qué ha cambiado la política municipal en 24 años?
La vida cambió mucho. Miedo me da que ahora vuelva a cambiar al revés, en España. Cuando yo llegué, solo ´´éramos dos mujeres en el grupo, la mayoría eran hombres. Decían de tomar algo, pero los hombres, como si las mujeres... estábamos Lourdes y yo. Ahora mismo ya no hay diferencia. Incluso somos más mujeres que hombres, cinco de nueve en el PSOE. Somos paritarios total. Incluso a la hora de las decisiones.
¿Y en Culleredo?
Creo que ha mejorado en servicios, en todo. Tardamos en tener las cosas pero ahora tenemos dos centros de salud, centros sociales. Los colegios que había no tienen nada que ver. En el 95 podía ser que se discutiera si ir a un privado o un público; hoy, en servicios, no hay discusión posible.
¿Los vecinos están más informados, participan más?
Sí, ahora hay redes sociales.Y siempre hemos tenido relación. Yo estaba habituada con Julio y ahora Rioboo también lo hace. Y con las administraciones. Creo que hay que luchar por lo que toca pero ser correcto.
Culleredo se implica mucho en las demandas educativas. ¿Eso fue cosa suya?
Sí, claro. Cosa mía totalmente. Y con Julio a la cabeza. Yo soy maestra y él era maestro y la sensibilidad…. Culleredo siempre ha creído que la educación tiene que ser prioritaria.
¿Sería igual si en la Xunta gobernase el PSOE?
Sí, de hecho cuando estuvo el PSOE en el bipartito y le tocó llevar Educación conseguí que todos los colegios tuvieran comedor gratuito, y también fuimos combativos. Lo mismo que en el aeropuerto: gobernando el PSOE en Madrid, estuvimos en contra. Cuando toca defender a los vecinos, no nos hemos parado porque tuviéramos un Gobierno amigo o enemigo. Lo que hay que reclamar, lo hay que reclamar.
¿Algún momento especialmente feliz o difícil?
Feliz, cuando se hizo el Ría do Burgo después de muchos problemas, a la Xunta no le valía el terreno... Se había ofertado uno donde está el centro salud cerca A Pasaxe. En A Corveira no les gustaban. Y Julio buscó una solución.
Una solución por la que el Concello tiene que pagar 1,5 millones más intereses.
Efectivamente. Pero porque no le gustaba a la Xunta el terreno.
Y se firmó un convenio que se incumplió y hay que pagar.
El convenio que te toca lo pagas y punto. Lo importante es que los niños estén escolarizados y estén bien. Al final el dinero, no es que lo malgastes, pero si hay que hacer una inversión pues habrá que hacerlo. ¿Salió así? Bueno, pero el centro había que hacerlo.
¿Y algo difícil?
Los años que tardan en llegar las cosas.
¿Se marcha sin cuentas pendientes?
Sí, tranquila, relajada. Creo que he sido honrada. Dicen que te conocerán por tus hechos.
