En el parque enciclopédico de O Pasatempo de Betanzos, en trámite de ser Bien de Interés Cultural (BIC), no solo roban partes de su estructura que tienen elementos decorativos, como unas piezas con conchas, sino que también se han producido actos vandálicos consistentes en coger fragmentos de las esculturas y arrojarlos al estanque, como quien tira monedas a una fuente. Este incidente fue detectado por el Ayuntamiento, y se une así a otros descubiertos por vecinos y por la asociación de amigos de O Pasatempo, como jóvenes que entran en el recinto y se encaraman en figuras que están en un muy delicado estado de conservación y otras que están en pleno proceso de consolidación.
El Gobierno local ha asegurado que se "reserva el derecho de acciones legales" contra las personas que accedan al parque, cerrado desde el pasado octubre por las obras de consolidación tras el último derrumbe, debido a que es fácil entrar por la parte superior.
El Concello anunció también que ya informó a la Policía Local de lo sucedido, y se tratará de identificar a las personas que han entrado estos días en el parque a través de las fotografías que han colgado en las redes sociales, para presentar la "pertinente denuncia".
El Ejecutivo local, sobre las críticas de profesionales de la restauración sobre cómo se están ejecutando las obras en
O Pasatempo, con el uso de hormigón y poliuretano, explicó que no se trata de las anunciadas obras de rehabilitación sino tan solo de actuaciones de "consolidación, a la espera de ejecutar un proyecto mayor de recuperación del estanque del retiro y del templete". El Concello además subraya que estos trabajos están "supervisados por expertos y técnicos en la materia" y todos los trámites realizados han sido "supervisados por Patrimonio de la Xunta" y el proyecto técnico "avalado" también por este organismo. No explicó sin embargo por qué esta obra lleva meses parada.
El proyecto de restauración del estanque y el templete, está siendo redactado por un equipo de arquitectos y restauradores y será entregado "en breve" al Concello, que lo remitirá a Patrimonio para que autorice los trabajos. En esta primera fase el gasto será de unos 300.000 euros, de los 750.000 del plan integral de recuperación que sufragan Diputación y Concello.
