Tras más de una hora de debate, la Corporación cambresa aprobó ayer de nuevo, trece años después de la primera vez, reclamar que el enlace de la vía ártabra con la autopista AP-9 discurra por Cuatro Caminos. Y como en 2006, impulsó la iniciativa la Asociación de Afectados por las Infraestructuras de Cambre „con varios miembros entre el público„, que presentaron una moción al pleno en la que se exigía también garantizar que la conexión sea libre de peaje y que continúe hacia la autovía A-6. La iniciativa salió adelante con los votos a favor del Gobierno local (Unión por Cambre, PSOE y BNG), Asemblea Cidadá de Cambre-Son y el concejal no adscrito Jesús Bao; la abstención de Ciudadanos y el voto en contra del PP y el exalcalde popular y no adscrito Manuel Rivas.

El Gobierno local defendió de nuevo que el enlace en Cuatro Caminos es el que resulta más beneficioso para los cambreses. Sostuvo, contra lo que argumentaba el PP, que aunque la conexión con la AP-9 en A Gándara implique menos derribos de viviendas, habrá que elevar esta cifra después para conectar con la autovía, dado que la infraestructura tendrá que volver por Cuatro Caminos.

Tras el debate, el alcalde, Óscar García Patiño, sostuvo que llegará "hasta las últimas consecuencias" para defender la opción que cree más beneficiosa para los cambreses. Criticó que el alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, insista en demandar que se agilice la conexión pese a carecer de permiso del Ministerio de Fomento para completarse y a incurrir en deficiencias en su tramitación, motivo por el que el Concello de Cambre llevó su rechazo a los juzgados. Patiño sostuvo que Seoane defiende la conexión en A Gándara para dar salida a las 900 familias que vivirán en la nueva macrourbanización de Xaz, a las que presupuso capacidad económica para afrontar el coste del peaje, que mermaría el crecimiento de Cambre.

Inicio de las expropiaciones

Las diferencias entre el Concello y los vecinos, por un lado, y la Xunta, por otro, sobre el trazado del enlace previsto por el Gobierno gallego para conectar la vía ártabra con la autopista AP-9 en A Gándara afloran en el inicio de los trámites para las expropiaciones. El alcalde cambrés, Óscar García Patiño, se ha negado a firmar el levantamiento de actas previas, y la Xunta y la Asociación de Afectados por las Infraestructuras de Cambre discrepan sobre las consecuencias de esta negativa. La entidad vecinal sostiene que la ley de expropiaciones forzosas "requiere" la participación del "representante de la Administración acompañado de un perito y del alcalde „o concejal en quien delegue„ y los propietarios". Cita también el fragmento de la ley que dicta que: "Si al levantamiento del acta previa a la ocupación ...] no acudiese el alcalde o su delegado, se suspenderá la diligencia [...] dándose cuenta a la Subdelegación del Gobierno". La asociación asegura que ha dado cuenta a este organismo de la situación.

La Xunta, sin embargo, asegura que la ausencia de la firma del alcalde "no invalida el procedimiento ya que se está realizando con todas las garantías para los expropiados y la firma del alcalde es una cuestión meramente formal". Critica, en cambio, que "es evidente que el alcalde está incumpliendo su cometido legal, de modo consciente, siendo una muestra de que utiliza un cargo público en contra del interés general". Afirma que el procedimiento transcurre "con normalidad".