El Juzgado de lo Social Número 2 de Refuerzo de A Coruña ha resuelto que Fran Amor Llopis, el estudiante del instituto María Casares de oleiros que padece una enfermedad degenerativa que se llama aniridia bilateral completa (nació sin iris), tiene un grado de discapacidad superior al que le reconoció la Xunta y lo aumenta del 70% al 75%. El incremento es pequeño pero significativo para la familia que ayer mostró su satisfacción por la resolución judicial tener una discapacidad "igual o superior al 75% y tener reconocido además que este joven precisa de otra persona (su padre) para realizar actos esenciales de la vida como se ha reconocido, le supone poder recibir una pensión un 50% más elevada que la cuantía básica (5.488 euros para 2019), algo fundamental para estos vecinos de Oleiros en una grave situación económica, sin ningún ingreso.

Este reconocimiento además le supone a Fran Amor, que está a punto de entrar en la Universidad y necesita mucho material para poder ver y estudiar los apuntes debido a su escasa visión, el poder optar a más ayudas y becas.

La Xunta le reconoció un 58% de discapacidad, el año pasado, tras la movilización de la familia, Política Social incrementó este porcentaje hasta el 64% al incluirle puntos sociales, por su situación económica, pero lejos del 76% que pedían los afectados. El juzgado señala que se debe aumentar la puntuación social e incluir más factores que los económicos, por lo que llega al 75%.

La Consellería de Política Social dice que la sentencia "avala" la "valoración médica" del equipo de discapacidad de A Coruña y certifica que diagnosticaron de forma concreta la patología y realizaron bien el diagnóstico. Afirma que el aumento del porcentaje al 75% "no implica ninguna diferencia a la hora de acceder a ayudas y prestaciones".