Clara tiene 14 años y una parálisis cerebral. Relata que le encanta leer y escribir y en uno de sus poemas afirma que "quiere ser feliz, feliz como Gaudí". Fue alumna del Vales Villamarín, ahora cursa sus estudios en el IES As Mariñas y ayer tomó la palabra en las jornadas de atención a la diversidad de Betanzos para explicar su caso, para relatar a los profesores reunidos en el Liceo las dificultades que tuvo para integrarse y hacer amigos y también para confesar que en muchas clases se aburre, que son muchas horas de trabajo al día, que carga en la mochila con 14 kilos entre libros de texto y el ordenador y que las obligaciones escolares no le dejan tiempo para sus aficiones y que ella, con presión, no funciona: "Los exámenes son una tortura", lamenta. Hizo frente a su timidez para leer una carta en la que se presenta como una "chica diversa", muy crítica con el sistema educativo actual. Clara reivindicó a Tonucci que, incidió, defiende que la escuela no puede ser un lugar de aburrimiento y que no se necesita tanto tiempo para aprender. Y también alabó las iniciativas que ha puesto en marcha el IES David Buján, de Cambre, e interpeló a su directora, ponente en las jornadas, para interesarse por sus políticas de integración .