Una de las grandes tradiciones de la Feira Franca Medieval de Betanzos, la expulsión de los leprosos, por primera vez en muchos años se realizará a piel, sin el carro, cargado de estos enfermos, tirado por los dos bois do país.

El Ayuntamiento ha decidido "por razones de seguridad" que los bueyes no participen en esta representación después de que el año pasado uno de los animales se pusiese nervioso debido a la gran multitud de personas y los gritos.

Otros años ya se habían producido situaciones problemáticas similares y la organización ya había debatido la posibilidad de eliminar su presencia en esta feria. Para evitar que alguien pueda resultar herido, se suprime ahora la presencia de estos animales. Los leprosos este año entrarán por Porta da Vila escoltados hasta la plaza de la Constitución, como siempre, pero a pie.

Otra de las novedades de esta edición de la Feira Franca es la recuperación de la tradición de las jarras de barro, que se repartirán en los establecimientos gastronómicos con cada consumición.

En total se distribuirán 7.000 jarras de barro que tendrán además el logotipo del 800 aniversario de la ciudad.

El Concello brigantino también ha abierto el plazo de inscripción para que los niños de 4 a 12 años participen también en la feria, dentro de un recorrido previo al arranque de la celebración por las calles del casco histórico. O Medievo para os nenos, es el nombre de esta ruta que se celebrará el día 10 a las once de la mañana. Se han dispuesto treinta plazas que se cubrirán por orden de inscripción en la Oficina de Turismo.

Sin plaza para 247 solicitudes

El Ayuntamiento ya está decorando con banderolas, estandartes y temas ornamentales las calles del casco histórico para esta Feria Medieval que se celebrará del 12 al 14 de julio. Son más de 300 banderolas y algo más de 6 kilómetros de telas.

El Ejecutivo municipal este año recibió 380 solicitudes para instalar puestos en la feria y solo se aceptaron 98 (veinte son nuevos en la feria, no habían estado en otras ediciones). El resto, hasta las 133 plazas que habrá en total en la feria, son para las asociaciones betanceiras que lo solicitaron y comerciantes del casco histórico. Los puestos de gastronomía fueron a subasta.