Junto al puente de madera sobre el río Mendo que comunica con la zona de los supermercados existen dos grandes tuberías que vierten agua al cauce. De una de ellas sale un líquido blanquecino que va dejando un rastro y atrae a algún pez. Unos metros más abajo otra tubería deja salir un chorro continuo de agua con espuma, que se queda flotando. En un tramo de unos cien metros existen ocho conductos que vierten al río, todos de pluviales, pero algo sucede porque el agua está siempre blanquecina y huele mal, según confirman los betanceiros que habitualmente caminan por este entorno, por otro lado, muy agradable.

Muchos pasean por allí con sus perros. Como María García. "Le dejé bajar porque es un Golden y le encanta el agua. Pero cogió una otitis y no le curaba. Le hicimos un cultivo y dio que tenía bacterias fecales. Está a tratamiento aún. Toda esa zona está fatal" cuenta María.

"En el último mes me han llegado cinco perros con infecciones después de bañarse en el río Mendo. En algún caso ya me lo dijeron y en otros les pregunté yo si se habían bañado allí. Pensaba comunicárselo ya al Concello porque creo que habría que investigarlo. Hay que tratarlos con antibiótico. Hace años ya tuve varios casos por lo mismo", destacó Jorge Díaz, de la clínica veterinaria Valdoncel.

"Nosotros no le dejamos bañarse, aquí siempre está muy sucio", contaba una señora que paseaba con su perro a orillas del Mendo el pasado martes. "Esta zona es horrible, está fatal, y no sé cómo estará en la zona del puerto, donde van los piragüistas", agrega María García.

Investigación

La sociedad de pescadores del río Mandeo denunció el pasado fin de semana un vertido, supuestamente de fecales, a través de estas tuberías de pluviales, que dejaron el agua de color blancuzco. Augas de Galicia, dependiente de la Consellería de Medio Ambiente aún no ha confirmado si ha analizado las aguas tal ser consultada después de esta denuncia.

El Concello de Betanzos explicó ayer que todas las tuberías que dan al Mendo son de pluviales, lo que también confirmó la empresa concesionaria Viaqua. De hecho la concesionaria tiene previsto ir hoy a esta zona a comprobar si es posible meter una cámara y tratar de llegar al origen del vertido.

La sospecha es de un vertido privado, quizá por una mala conexión, según indicaron. Fuentes municipales indicaron que en alguna ocasión se habían detectado vertidos de particulares a la red de pluviales, que fueron corregidos.

Respecto a los casos de los perros, apuntan que no descartan que se produjese un vertido de purines río arriba, porque sucedió un caso similar hace años, también con perros afectados.

El Concello señaló que esta zona está dentro del Plan de Verquidos da Xunta y Augas realiza inspecciones cada tres meses, además del seguimiento que efectúa Viaqua.

La concesionaria del servicio de saneamiento y agua en el municipio brigantino señala que si sale agua continuamente de estos tubos al Mendo es porque recoge aguas superficiales pero también subterráneas, como manantiales, pero no tienen que llegar residuales.