Movimientos de tierras, explanaciones, modificaciones de la rasante para hacer un acceso más ancho y un lugar para colocar bancos para sentarse, una caseta de obra, un cuadro eléctrico y carteles de prohibido el paso por el camino hacia la playa, además de hierros, trozos de hormigón y vallas metálicas tirados por el suelo y peligrosos hoyos. Estas son algunas de las obras realizadas en la entrada de la playa de Barrañán acompañando a la instalación de los chiringuitos de refrescos, todo en zona marítima. Los usuarios y vecinos de la zona han protestado por los hierros y agujeros en la tierra y también por el cierre del camino.
La policía ya acudió al lugar y levantó atestado para abrir un expediente municipal pero también han tomado medidas la Xunta y Demarcación de Costas del Estado. Los responsables solicitaron ante la Xunta el permiso para instalar los quioscos de bebida y alimentación pero las obras se ejecutaron antes de contar con dicha autorización y además ocupando mucha más superficie de la permitida.
La Xunta otorgó a los responsables un plazo para presentar alegaciones contra el expediente sancionador que se les ha abierto porque lo que han realizado no es legalizable, va más allá de la simple instalación de dos casetas desmontables.
