La que fue concejal de Benestar Social de Carral en estos últimos cuatro años, Margarita Ramilo, ha desmentido las acusaciones del sindicato Comisiones Obreras (CCOO) sobre su supuesta contratación.

"Yo al dejar se ser concejal de Benestar fui al paro. Soy auxiliar de ayuda en el hogar, titulada, y me llamaron de una empresa, Da túa man, que después cerró. No es cierto eso de que el anterior Ejecutivo incumpliese el convenio y me contratasen. El 30 de junio a las siete y media de la tarde me llamó el concejal Francisco Bello para decirme que se había enterado de que yo trabajaba en esto y que si me interesaba mandar mi currículo a la nueva empresa. Pero no envié el currículo. Solo quiero decir que como cualquier persona, no tienes trabajo y lo buscas en tu profesión", afirmó.

La concejal, ahora en la oposición, también negó que el servicio de ayuda a domicilio funcione ahora sin problema, como afirma CCOO. Indicó que en su caso, que es cuidadora y tutora de un familiar con una discapacidad del 99%, ha tenido que rechazar el servicio de ayuda en el hogar del Concello porque no se lo prestan en el horario que ella precisa. "Vinieron varios días en mi horario pero luego volvieron de nuevo a otra hora. No hay coordinación", señaló.