La Guardia Civil ha investigado a un vecino de Miño por simular ser víctima de una estafa que denunció por cuatro cargos no autorizados que se efectuaron en su cuenta bancaria por un importe de 120,87 euros. Al mismo tiempo, las fuerzas de seguridad también investigaron a otro hombre, vecino de Ares, por un delito de estafa leve, que ha resultado ser hermano del presunto falso denunciante.

El equipo de estafas telemáticas de la Guardia Civil explica que en la búsqueda del autor ilícito de los cargos, los agentes identificaron al hermano del hombre de Miño como el ejecutor de estos pagos. El autor de la supuesta estafa contrató un servicio a través de internet, con un coste mensual de 39,99 euros, e hizo el abono con la tarjeta bancaria del denunciante, que se encontraba presente cuando se hizo el primer pago. Por ello los agentes investigaron la implicación de la supuesta víctima de estafa, quien autorizó el primer cargo en su cuenta.