Las barcas remontaron ayer de nuevo el río Mandeo rumbo al campo de Os Caneiros para disfrutar de la popular romería fluvial, uno de los días grandes de las fiestas patronales de Betanzos. Fue la jira más concurrida de los últimos años, pero se desarrolló sin sobresaltos. No hubo incidencias graves, más allá de cuatro traslados por intoxicación etílica y algunas asistencias por picaduras, cortes o pequeñas lesiones.

El buen tiempo y la coincidencia de la romería en domingo animó la asistencia, aunque los efectivos de Protección Civil destacan que fue una de las romerías "más tranquilas" de los ´últimos tiempos. Os Caneiros volvió a mostrar dos caras, la que se aferra a la tradición y la que apunta más hacia el jolgorio, aunque poco a poco la primera ha logrado abrirse paso tras las reiteradas llamadas del Concello a "recuperar la romería de antaño".

Las personas que quisieron disfrutar de la jira más tradicional remontaron el río desde el muelle de A Tolerancia, algunos con sus barcas engalanadas, y disfrutaron de una apacible comida en compañía de familiares o en pandilla. La subida, como siempre, estuvo amenizada con la música de las charangas NBA y DGT.

A pie de campo, la tradición se difuminó en ese botellón de pistolas de vino que irrita a los defensores de la romería "de siempre". Una realidad que, guste o no, tampoco puede escamotearse y que el Concello intenta desterrar con campañas de concienciación. A la vuelta de Os Caneiros, hubo fuegos artificiales y verbena de la orquesta Galilea.

Las fiestas continúan hoy con una jornada dedicada especialmente a los más pequeños, que podrán disfrutar de descuentos en las atracciones. A partir de las 19.30 horas se disputará el X Trofeo Cidade de Betanzos de Fútbol y a las 21.00 horas, el I Triangular de Fútbol Sala Sénior Masculino.