Vecinos de Lubre ultiman las alegaciones al plan especial de la senda del río Maior que promueve el Concello de Bergondo y alertan de los "riesgos medioambientales" que, sostienen, entraña esta actuación, especialmente por la previsión de instalar tres colectores de saneamiento que se conectarían a otros siete construidos hace años y actualmente sin uso para conducir las aguas residuales a la depuradora de Gandarío.

El plazo para presentar alegaciones finaliza mañana, martes 3 de septiembre, y la Plataforma en Defensa da Ría de Betanzos e Sada ya ha avanzado que respalda a los vecinos afectados y que se sumar´´a a sus alegaciones. El Concello de Sada analiza el proyecto y decidirá y al término de la pasada semana todavía no había decidido si realizaría alguna sugerencia por su posible afección al río, que desemboca en la playa sadense de As Delicias. El BNG de Bergondo convocó a los vecinos para informarles del proyecto y expresó sus dudas por el trazado escogido para la red del saneamiento, por el riesgo de desbordamientos que provoquen vertidos al río.

El Concello de Bergondo y críticos con el proyecto coinciden en que es necesario completar el saneamiento de la parroquia, pendiente desde hace décadas. Los vecinos críticos con la actuación discrepan con la instalación de alrededor de 1.600 metros de colectores bajo la senda fluvial y expresan sus dudas de que la estación de bombeo de Cambade tenga capacidad suficiente para absorber todo el caudal de agua en caso de crecida del río. Expresan también sus dudas sobre el estado en que se encuentran los colectores ya construidos. "Llevan muchos años enterrados sin uso", advierten. "El saneamiento es una de las necesidades más urgentes de la parroquia de Lubre, pero el proyecto debe ser riguroso, respetuoso con el medio ambiente y con el funcionamiento más eficiente posible", defienden.

Los afectados denuncian además que el proyecto "afectará a molinos de alto valor etnográfico, a edificaciones y a fincas cuyas traseras quedarán abiertas". Sobre esto último, critican que el plan destina 12.000 euros para la reposición de muros, pero que no contempla realizar el cierre de fincas que no lo tengan. Otro punto de discordia guarda relación con errores catastrales y en la identificación de los propietarios afectados.

Los vecinos críticos con la actuación cuestionan también la necesidad de la senda y cuestionan su futuro mantenimiento "en una zona donde el estado de las carreteras es deplorable y no se mantienen limpias ni las cunetas ni las aceras". El BNG, por su parte, defiende que el trazado de esta senda debería consensuarse con Sada para que tenga continuidad y no finalice en el término bergondés.

El Concello de Bergondo defiende la necesidad de este proyecto para completar el saneamiento e incide en el bajo impacto de la senda proyectada que, destaca, permitirá mejorar la movilidad peatonal y ciclista. Anima a los residentes a presentar alegaciones que puedan mejorar la actuación.